La Quinta Columna

Por: Mario Alberto Mejía / @QuintaMam

 

Con el apoyo de la estructura de La Ciudad de las Ideas —que maneja dinero público de varias entidades—, Andrés Roemer hace todos los preparativos en el Museo Barroco de Puebla para su boda con Pamela Cortés.

Y ya hay fecha:

El 19 de noviembre, justo después de la ceremonia de clausura del denominado Festival Internacional de Mentes Brillantes.

En este sentido, los operadores a sueldo de Roemer trabajan en dos temas:

La edición número 10 de La Ciudad de las Ideas y la boda de su director general y curador.

Lo mismo eligen hoteles para hospedar a los ponentes internacionales, que se decantan por los arreglos y flores que harán lucir el himeneo de Roemer y Pamela.

Personas cercanas a la pareja le confiaron al quintacolumnista que, como ellos están muy ocupados en sus actividades de “socialités”, no encontraron mejor opción que dirigir a control remoto —desde la Ciudad de México, San Francisco o París—la que será la boda de sus sueños.

Una vez que fue defenestrado de la Embajada de México ante la UNESCO, el empleado de Ricardo Salinas Pliego tomó la decisión de casarse con la joven y guapa poblana, con quien mantiene una relación desde hace varios años.

Pamela, autodenominada “la chica Almodóvar”, fue conductora en  E! Entertainment y miembro del Consejo Directivo de Grupo Sexenio.

Ha colaborado en las revistas Vogue y Marie Claire con escritos sobre cine y moda: sus grandes pasiones.

Roemer le pidió matrimonio a Pamela en París a finales del año pasado.

Así lo narró ella en su blog:

“Alguna vez (historia real), mi mamá me preguntó en la mesa de la cocina junto a mi familia: ‘si pudieras describir al hombre con el que quisieras pasar el resto de tus días, ¿cómo sería?’ Hasta ahora, mi hermana se sigue riendo de que te describí a detalle y así llegaste a mi vida: extremadamente inteligente, fascinante, self-made, intenso, apasionado, amante de la cultura, el cine, el arte y la vida loca. Divorciado, ya con hijos (maravillosos y que me quisieran), ateo, liberal. Un absoluto personaje. Alguien que me hiciera crecer y aprender todos los días. La fortuna de haberte encontrado es inmensurable, así como la ilusión de construir un futuro a tu lado. No ha sido un año fácil, pero ante la adversidad me has demostrado ser el hombre más fuerte, ético y fiel a sus convicciones; cualidades que simplemente me hacen sentir más orgullosa y convencida de que no existe mejor ‘roto’ para esta ‘descosida’. Hace algunos días, cuando Navidad y Hannukah curiosamente coincidieron, me dedicaste las palabras más bonitas que he escuchado, me regalaste el anillo que siempre soñé y me pediste ser tu esposa en mi ciudad favorita del mundo: París. Mi respuesta obviamente fue sí. SÍ, hoy mañana y siempre. Eres ‘the man of my dreams’, el mejor maestro, amigo y cómplice de aventuras. TE AMO CON TODO MI CORAZÓN y sólo resta decir… que empiece la cuenta regresiva!!!.”

Hasta aquí la historia es de ensueño.

Pero la duda mata:

¿Este festival recibe dinero público para su realización?

La respuesta es una e incontrovertible:

Sí.

Desde los tiempos de Mario Marín, el gobierno del estado le ha entregado millonarios recursos a Roemer para que La Ciudad de la Ideas sea una realidad.

Entre los patrocinadores también se encuentran la Secretaría de Cultura federal y Conacyt.

De hecho, en noviembre próximo se cumplirán 10 años de su fundación.

El 17 de noviembre será inaugurado el festival que contará, entre otros, con los siguientes prestigiados ponentes:

Adam Alter, “el ‘Sherlock Holmes’ de la cognición y el comportamiento humano”.

Adam Riess, Premio Nobel de Física en 2012 “por demostrar la expansión acelerada del universo”.

Adam Gopnik, “el mejor comentarista y ensayista social del The New Yorker”.

Y más: Julieta Venegas, Ximena Sariñana, Alfonso Arau y, faltaba menos, la orquesta Esperanza Azteca.

No está nada mal casarse en el Museo Barroco.

Al contrario.

Lo que suena terrible es utilizar la estructura de un festival que maneja fondos públicos para organizar la boda de la década..

Y es que la feliz pareja tendrá como invitados, entre muchos otros, a las celebridades que vendrán a este festival de Mentes Brillantes.

Imagínese usted estar bailando “Bule-bule” o “Payaso del rodeo” junto a un premio Nobel de Física o un experto mundial en la investigación de células madre.

Qué chic.

Qué cuic.

Qué extraordinary life.

 

Nota Bene: Cierro con unas líneas del periodista Carlos Puig que en su momento dedicó a Andrés Roemer, a propósito de su doble papel como cónsul de México en San Francisco y la dirección y organización de La Ciudad de las Ideas:

“Esta confusión entre el servicio público y el negocio privado, esta afición de ignorar el conflicto de interés o servirse de un cargo público es una costumbre muy mexicana, semilla de nuestra endémica corrupción”.

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