Tanto Morena como el PRI han señalado que para la elección del próximo año se han propuesto una meta que los lleve a ganar el gobierno del estado y también la Presidencia de la República

Por Mario Galeana 

Los partidos políticos se han puesto como meta la recaudación de más de un millón 200 mil votos para ganar la gubernatura estatal en el proceso electoral de 2018.

El último en fijar la cuota fue el senador Miguel Barbosa Huerta, quien la mañana de ayer dijo desde Tehuacán que Morena en Puebla se ha propuesto alcanzar la cifra de un millón 253 mil votos.

“Esa es nuestra cuota, nuestra obligación. La única prioridad por encima de cualquier otro cargo, por encima de la gubernatura, de las senadurías, de las diputaciones, de las alcaldías, es que Andrés Manuel López Obrador sea el próximo presidente de México. Y para eso necesitamos 22 millones de votos”, expuso.

En su más reciente visita a Puebla, el dirigente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, dijo a los militantes de su partido que requieren al menos de un millón 160 mil sufragios para ganar Casa Puebla en los próximos comicios.

En una reunión a puerta cerrada que se realizó el 8 de noviembre en la capital del estado, el presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) tricolor previó que el voto de la elección de 2018 se dividirá en tercios, con Morena y el Frente Ciudadano por México (PAN-PRD-Movimiento Ciudadano) como principales contendientes.

La elección del millón de votos

La cifra sería histórica. Hace siete años que ningún candidato roza o supera el millón de sufragios. El gobernador José Antonio Gali Fayad, por ejemplo, obtuvo 805 mil 899 mil votos en el proceso electoral de 2016, y eso le bastó para imponerse a su más cercana contendiente, la priista Blanca Alcalá Ruiz, por al menos 11 puntos porcentuales.

En realidad, la participación de la ciudadanía en las urnas no alcanzó 45% en los comicios del año pasado, posiblemente porque se trataba de una elección única, donde sólo se eligió gobernador.

El proceso electoral que se avecina es similar al de 2010, cuando el panista Rafael Moreno Valle fue electo gobernador de Puebla con un millón 111 mil 318 boletas marcadas a su favor, 300 mil más que su más cercano competidor, el priista Javier López Zavala.

Además de la titularidad del gobierno estatal, en aquella elección se renovaron las 41 curules del Congreso local y las alcaldías de los 217 ayuntamientos.

Al proceso electoral de 2018 se le sumará la elección del presidente de la República y la renovación del Congreso de la Unión. Con tal cantidad de cargos en juego, analistas han estimado que la votación podría alcanzar 60% de la participación ciudadana.

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