Contexto. La guerra entre bandas comenzó, según fuentes policiales, cuando el líder del mercado Morelos contrató a oaxaqueños para asesinar a sus rivales de la vecina entidad.

La pugna por la venta de droga en la capital poblana ha dejado como saldo homicidios violentos, enfrentamientos, narcomensajes, secuestros y descuartizados.

Los principales operadores en la plaza poblana son la banda liderada por El Grillo y Los Oaxacos, quienes están en constante lucha por tener el poderío.

José Cristian N, alias El Grillo, quien fuera líder en el mercado Morelos, fue detenido el 24 de junio del año pasado, en Ciudad de México. A su historial se suman secuestros, extorsiones, homicidios, ejecuciones  y fosas clandestinas con cadáveres que depositó en Amozoc.

Aún detenido, desde el penal de San Miguel operaba el narcomenudeo en la capital por lo que las autoridades lo trasladaron a un Centro de Reinserción Social (Cereso) federal en Miahutlán, Oaxaca.

Renuente a abandonar el negocio y luego de la detención de Julio Mix, uno de sus principales socios, dejó a cargo de su esposa Carolina, quien se apoya en la hermana de El Grillo.

El lunes, la Fiscalía General del Estado (FGE) informó que tras diferentes operativos detuvieron a seis personas con droga en un bar de La Ciénega, presuntamente propiedad de El Grillo.

Además de que hubo otras detenciones en un inmueble del Fraccionamiento Jorge Murad y en Tres Cruces, donde había efectivo, vehículos robados, cartuchos y uniforme presuntamente policiaco.

Las autoridades también aseguraron un local de autopartes en donde había cristal.

Fuentes policiacas revelaron a 24 Horas Puebla que la guerra con la banda de Los Oaxacos inició luego de que El Grillo contratara oaxaqueños para matar en tierras poblanas a integrantes de la banda.

“Él mandó a matar a miembros de la banda de Los Oaxacos por gente igual de Oaxaca, para que viniera a matarlos y ahí empezó la guerra”, mencionó una fuente policiaca, quien pidió el anonimato por seguridad.

Los Oaxacos llegaron a la capital y se instalaron en la zona de La Resurrección, principalmente en las colonias 13 de Abril y 3 de Mayo.

Su principal zona de operación es San Sebastián de Aparicio,  Bosques de Manzanilla, Bosques de Santa Anita y las colonias colindantes a la zona.

El último mensaje contra de ellos fue el 25 de enero luego de que se localizó una cartulina verde con amenazas contra el grupo criminal junto a restos humanos guardados en caja de cartón, en la colonia 3 de Mayo.

El mensaje, dijeron, aseguraba que Los Oaxacos no tendrían escapatoria, mientras que el cuerpo pertenecía a Javier N, un hombre que había salido de prisión hace unos días.

Otra víctima de la pugna por la plaza fue un que fue encontrado atado de las manos y con golpes, en la colonia Bosques de Manzanilla, cerca de la Unidad Tecnológica de Puebla, (UTP).

Las autoridades han señalado que tras aplicar diferentes estrategias de inteligencia tienen ubicada la actividad de los grupos criminales en la capital. Sin embargo, los enfrentamientos y homicidios continúan sin que hayan logrado desarticular a las bandas al 100%.


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