Saber manejar los tiempos en política es una virtud que sólo se adquiere con la experiencia y oficio. Fernando Manzanilla Prieto sabe de eso y con paciencia esperó el momento propicio para renunciar a la Secretaría de Gobernación.

Su salida era un secreto a voces que se pactó desde el primer mes del gobierno barbosista. El acuerdo de la negociación de las dos partes fue lo que prolongó la renuncia.

El distanciamiento entre Fernando Manzanilla Prieto y Luis Miguel Barbosa Huerta, se dio antes de que el segundo ganará la elección y asumiera la gubernatura. 

La petición a Barbosa, fue más allá, pidieron investigaciones de sus administradores para abrirle juicios políticos.

Las negociaciones llegaron a buen acuerdo. El fuero de diputado federal blindó a Manzanilla para ser el responsable de la gobernabilidad del estado por tercera ocasión.

Las diferencias entre las dos partes ya se habían dado. El distanciamiento no lo pudieron ocultar. Sólo era cuestión de tiempo para la renuncia. Atrás quedó la amistad que nació como compañeros en el Senado.

El invento de la alianza de Manzanilla con el empresario Eukid Castañón es una vacilada amarilla como acostumbra la publicación donde apareció. El primero ha hecho alianzas para su proyecto personal pero con gente involucrada en la política y los partidos políticos.

En adelante hará ruido y mucho. Por lo pronto tendrá intervención directa en el jaloneo de las próximas elecciones intermedias. Mismas que, con su renuncia, dio el banderazo de salida.

En su mente desde hace tiempo se fijó la meta de gobernar Puebla. Y se esforzará para lograrlo. Sabe que el camino es largo y sinuoso. Pero también sabe que está en la jugada y no se bajará del carro tan fácilmente.

Como diputado podrá conformar el Partido de Encuentro Solidario y el Partido Vamos. Además de atender personalmente la Fundación Imagina para un Proyecto Integral de Desarrollo de Capacidades y Seguridad Alimentaria que encabeza hace años.

La salida de Manzanilla la anunció La Entrega el 22 de agosto de 2019 y no nos equivocamos, ganamos la apuesta al mismo equipo del secretario. El botón de muestra es el siguiente: “Sospechoso silencio. La renuncia de Salomón Kuri Contreras a la Secretaría de Administración del gobierno del estado no será la única en el corto plazo.

“En Casa Aguayo, trascendió que Fernando Manzanilla Prieto prepara maletas para la primera quincena de septiembre. El secretario de gobierno contempla su regreso a la diputación federal. El ambicioso proyecto político que ronda por su cabeza requiere de tiempo y trabajo que desde gobernación no puede dedicarle.”.

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