La Entrega

Por Adrián Ruíz /ruizdurhotmail.com

Justa medida. Sucede cada 6 años en el ámbito político poblano. Cada fin de sexenio es pan con lo mismo. Los detractores –que fueron pocos- y serviles, expresan del gobierno en turno como les fue en la feria. Difícil exponer la realidad. Los logros se sobrevaluan. Las promesas incumplidas se ocultan.

En Puebla hubo cambios y modificaciones importantes. También situaciones arbitrarias. Para quienes gustan de elogiar y besar manos lo realizado por el gobierno es algo histórico por decir lo menos. Pero acaso los poblanos no merecemos eso y más. Los que asumen el poder tienen la obligación de mejorar en todos los rubros la situación de los gobernados. Es lo mínimo que deben hacer porque administran los recursos del pueblo.

En tanto los “contras” del gobierno de todos los extractos sociales, principalmente de los medios de comunicación que no fueron invitados al banquete. Y que estaban acostumbrados a saciarse a manos llenas en los pasados sexenios. Todo fue negativo. Nada fue acertado. Y como podían aprobarlo si les quitaron las suculentas tajadas a las que los acostumbraron.

Así uno y otro bando en los siguientes días y hasta fin de mes, elevarán hasta la estratósfera las obras benéficas. El mejoramiento de Puebla en algunos puntos de la capital, también servirán para decir que nada mejor nos pudo ocurrir a los poblanos. Apostarán y apoyarán  el tan mentado proyecto de continuidad de 30 años –nada más falso- el futuro es siempre incierto y 30 años son muchos, representan un cambio generacional.

Pero como soñar no cuesta nada y creer en algo aunque sea incierto es alimento de los humanos. Los poblanos que quieren sea realidad seguirán con la venda en los ojos. Los realistas verán, dirán y votarán en su momento por quienes crean sean las mejores opciones.

Los detractores seguirán con el pesimismo a flor de labios. Sobre todo porque por lo menos los 2 siguientes años, volverán a saborear el pastel de lejos. El gobierno que asumirá el poder el 1 de febrero, tampoco los contempla para disfrutar de la miel que en tiempo pasado gozaron.

A pesar de los elogios que iniciaron hace semanas a propagar, ningún beneficio recibirán. El cambio de opinión se debe a que pretenden volver al tiempo del “marinismo”, donde además de los beneficios y preferencias, tenían voz y voto para algunas decisiones.

El tiempo para ellos finalizó y como por arte de magia se volvieron críticos al extremo. Así los acostumbraron los gobiernos. Los intereses económicos están por encima de cualquier cosa.

Por desgracia los gobernadores anteriores sin visión alguna, dejaron a Puebla tal y como la encontraron. Sólo en el aspecto de retraso. Porque la hundieron más en cuanto al saqueó de recursos económicos. Todos se dijeron poblanos en su momento y que querían a Puebla más que a sus propias familias. Ninguno dijo como la querían dejar –más jodida-.

 

 

Reporte del Informante

Mecha encendida. La olla exprés que representa la Policía Auxiliar, sólo requería de abrir la válvula de escape para que estallará todo lo que viene arrastrando desde administraciones anteriores. Es un secreto a voces que la corporación es digna representante de la cloaca de corrupción, prepotencia y abuso de autoridad que se ejerce.

La muerte de Antonio Cortés Ruiz, policía auxiliar que regresaba de San José Chiapa, tras la culminación del evento de pipa y guante que tuvo verificativo, sólo fue el la gota que derramó el vaso para que los policías, sacaran a relucir los detalles del maltrato y explotación de que son víctimas. Nada es nuevo verdad “capitán” Morgado o Luidivino Mora Tejeda.

Para poder integrarse y formar parte de la policía auxiliar los y las elementos, deben pasar por hostigamiento sexual a las mujeres –así- lo denunció una mujer policía-, cobro de uniformes, falta de seguridad social y bajos salarios. Los privilegiados y amigos del director por el contrario trabajan de “aviadores”.

La manifestación de 3 mil policías en las instalaciones de San Pablo Xochimehaucán, la mañana de ayer, fue para expresar a la opinión pública las vejaciones de que son objeto. En un grito unido pidieron la destitución del director Héctor Guillermo de la Peña y del subdirector operativo, Ofir Picasso Garrido a quien acusaron directamente de “exigir” favores sexuales a las mujeres policías.

Por si fuera poco los responsabilizaron de la  muerte de Antonio, porque lo mandaron a San José Chiapa, en una motocicleta y a decir de los manifestantes no sabía conducir y además estaba desvelado porque salió del turno nocturno.

Entre otras anomalías enumeradas por los policías auxiliares, es que no cuentan con la capacitación necesaria para emprender las tareas de vigilancia y seguridad, como los policías estatales. A pesar de eso han realizado importantes detenciones. Carecen de servicios médicos, a pesar de contar con una clínica en la que nunca hay medicamentos y menos pueden acceder a intervenciones quirúrgicas.

No todo lo que relumbra es oro.

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