El candidato es el puntero en las preferencias electorales en la capital, revela encuesta realizada por la empresa Ipsos
Por Ignacio Juárez Galindo
El candidato de la coalición Sigamos Adelante (PAN-Panal-CxP-PSI), José Antonio Gali Fayad, arrasa en las preferencias electorales del municipio de Puebla, al ubicarse 23 puntos por arriba de la abanderada del PRI-Verde-PES, Blanca Alcalá Ruiz, según un estudio realizado por la empresa Ipsos Public Affairs.
El estudio, además, establece que la senadora del PRI con licencia es la que registra la peor calificación en la opinión efectiva entre los electores, con menos 7%.
En tanto, Tony Gali es el mejor ubicado, con un porcentaje positivo del 28%, seguido por el candidato de Morena, Abraham Quiroz Palacio, con 13%; la perredista Roxana Luna Porquillo, con 11%, y la abanderada independiente Ana Teresa Aranda Orozco, con 10%.
La empresa Ipsos realizó su sondeo entre el 30 de abril y el 3 de mayo pasado, y estuvo conformado por 600 encuestas, cara a cara, en viviendas del municipio de Puebla, con personas mayores de 18 años de edad. La medición tuvo un margen de error de más/menos 4%.

El estudio incluyó un ejercicio simulado con boleta de sufragio, a fin de conocer las tendencias electorales a la pregunta: “si hoy fuera la elección para gobernador del estado de Puebla, ¿por quién votaría?”. El resultado fue el siguiente:
Gali obtendría, en total, 44% de los sufragios, divididos de la siguiente manera: PAN, 41%; Nueva Alianza, 1%; Partido del Trabajo, 1%; Compromiso por Puebla, 1%; cero del Partido Social de Integración.
Por su parte, Blanca Alcalá obtendría 21% de las preferencias: 19% del PRI, 2% del Verde Ecologista; 0% del Partido Encuentro Social.
El tercero mejor ubicado en la medición es Abraham Quiroz Palacios, candidato del partido Movimiento Regeneración Nacional, con 10%; seguido por la abanderada del Partido de la Revolución Democrática, Roxana Luna Porquillo, con 6%; y finalmente la independiente Ana Teresa Aranda Orozco, con 3%.
Ipsos reporta que el 10% de las personas consultadas anularía su voto, mientras que otro 5% no sufragaría por ninguno de los abanderados.