Por Guadalupe Juárez
En marco de la negociación entre el sindicato de trabajadores de Volkswagen y la armadora alemana, el gobernador Rafael Moreno Valle pidió a ambas partes sensibilidad para llegar a un acuerdo.
A los empleados los conminó a solidarizarse con la ensambladora por la crisis en la cual está inmersa, mientras que a la empresa la exhortó a garantizar que más adelante, con el crecimiento de la planta automotriz, beneficie y recompense a los empleados por su apoyo en esta etapa.
“Yo creo que se debe de hacer un planteamiento a largo plazo, una negociación que permita que los trabajadores sean solidarios en estos tiempos difíciles para la empresa, pero que también se garantice que cuando haya mejores tiempos se les pueda compensar de manera adecuada”, sostuvo después de la gira realizada en el municipio de Libres, donde inauguró la rehabilitación de una Casa de la Niñez Indígena.

JAFET MOZ / AGENCIA ES IMAGEN
El Ejecutivo afirmó que no puede intervenir en las negociaciones entre las partes, pero si se lo solicitan, en caso de no llegar a una solución, está dispuesto a hacerlo.

Rafael Morenó Valle manifestó preocupación ante un posible recorte de personal, debido a que no sólo afecta los empleos directos en la entidad, sino a las proveedoras de Volkswagen, lo cual a largo plazo significa un impacto en la economía de la entidad.
Sin embargo, aseguró que después de la mala racha, la empresa alemana invertirá en nuevos proyectos además de garantizar que Audi vive una situación muy diferente, puesto que los vehículos que se producirán “prácticamente están vendidos”.
Ayer, en las instalaciones del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz de Volkswagen de México (Sitiavw), ubicadas en la colonia Aquiles Serdán de la ciudad de Puebla, se realizó una consulta entre empleados para rechazar o aceptar el acuerdo denominado Punto de Equilibrio, propuesto por la firma alemana.
Dicha iniciativa establece que, en caso de recurrir a paros técnicos, los empleados recibirán su salario completo y la armadora establecida en Cuautlancingo mantendrá su ritmo de producción sin afectar la planta laboral.
