Las intenciones políticas de la diputada del tricolor despiertan sospechas entre especialistas, pues además de inexperta ésta es esposa de Lázaro Jiménez, conocido marinista involucrado en las licencias de mototaxis
Por Mario Galeana
En medio de señalamientos por la utilización de recursos de procedencia desconocida, la diputada federal Xitlalic Ceja García ha alzado la mano para buscar convertirse en candidata por el PRI al gobierno de la ciudad de Puebla.
Sus aspiraciones, que no han sido reveladas públicamente, han corrido al interior del PRI como si de una mecha encendida se tratase.
El siseo sobre la búsqueda de Ceja García por el palacio de Charlie Hall, que ha llegado hasta los oídos de al menos tres periodistas locales, ha generado sospechas con respecto a la procedencia de los recursos que ha inyectado en distintas campañas electorales, incluyendo la suya.
Mientras algunos acusan el envío de recursos procedentes desde el mismo Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, otros apuntan el dedo hacia su esposo: el exfuncionario Lázaro Jiménez Aquino, señalado por el otorgamiento desmedido de licencias de mototaxis durante el sexenio de Mario Marín Torres, operación que habría representado un negocio millonario.
Ceja, aspiraciones y lastres
Cobijada por la estructura del exgobernador Marín Torres, quien es compadre de su esposo, Xitlalic Ceja consiguió el 7 de junio pasado, en la más reciente elección federal, una curul en San Lázaro, pese a su corta trayectoria en la función pública.
Hasta antes de asir el triunfo en el distrito VI, al norte de la capital, Ceja García sólo había obtenido una regiduría en el Ayuntamiento, y dentro del PRI su máximo logro consistía en presidir el Frente Juvenil Revolucionario, del 2003 al 2004.
¿Cómo consiguió una casi desconocida los votos necesarios para formar parte de la Cámara de Diputados? Además del brazo operador del exgobernador, periodistas sugieren la intervención económica de Lázaro Jiménez, acusado de otorgar miles de licencias para mototaxis.
“Lázaro, junto con Gabriel Sodi –su secretario particular–, y Juan Manuel Alcántara Silva, lograron instaurar una sofisticada red de corrupción, además de gestionar permisos para el funcionamiento de mototaxis, obteniendo ganancias multimillonarias, las cuales fueron divertidas en diversas plazas comerciales en la entidad y en Chiapas”, de donde es originario el esposo de la diputada, señaló en días recientes el periodista Ricardo Morales Sánchez, en su columna Las Serpientes.
Junto con Morales Sánchez, dos periodistas más dieron cuenta ayer de las aspiraciones de Ceja García por buscar la candidatura del PRI en la capital: Mario Alberto Mejía y Arturo Luna Silva.
Mario Alberto Mejía apuntó, por ejemplo, que al interior del PRI se mantienen dudas respecto del financiamiento con el que Ceja García ha sostenido sus actividades proselitistas.
“A decir de fuentes ligadas a su entorno, el financiamiento de sus labores de ‘acarreo’ proviene de recursos monetarios de ‘procedencia desconocida’, mismos que se entregaban en una vivienda ubicada en la colonia Miguel Hidalgo mediante un esquema piramidal”, señaló.
La noche previa a los comicios donde se renovó el gobierno de Puebla, la Policía Ministerial realizó un operativo en una vivienda de la diputada, ante la sospecha de que en el inmueble se repartía supuesto dinero ilícito para actividades relacionadas con la compra de votos y movilización de operadores políticos.
Sin oficio legislativo
Desde su arribo a la Cámara de Diputados, Ceja García ha promovido tan sólo tres proyectos legislativos, y todos ellos se encuentran pendientes de análisis.
En cambio, la diputada federal se ha añadido a 18 proyectos legislativos impulsados por otros legisladores, de los cuales sólo dos han sido aprobados.
En cambio, Ceja ha ocupado su curul como trinchera de golpeteo político electoral. El periodista Arturo Luna Silva dio cuenta anteayer de que la “hilarante recién destapada a la alcaldía capitalina” y sus compañeros poblanos de bancada promovieron al menos nueve puntos de acuerdo con tendencia electoral durante el proceso comicial de este año.
En todos los amagues legislativos, sin embargo, los diputados federales priistas poblanos no han obtenido respuestas satisfactorias, puesto que los puntos de acuerdo han sido desechados o, en su defecto, se mantienen pendientes.
Pero el gris apoyo que Ceja García propinó a la ex candidata del PRI al gobierno de Puebla, Blanca Alcalá Ruiz, no sólo se reflejó en San Lázaro.
La diputada federal tuvo a su cargo la operación electoral en los distritos XI y X de la capital, donde el PRI cayó por 23 mil 445 votos frente al PAN.