Los mismos diputados federales del PRI están conscientes de que se avecina una terrible tormenta económica para el 2017, producto de los recortes presupuestales que se avecinan, los cuales se estima podría ascender hasta los 250 mil millones de pesos.

Así se lo hicieron saber al presidente Peña hace uno días, cuando sostuvieron una reunión en Los Pinos, previo al cuarto informe de labores y a la apertura del periodo ordinario de sesiones.

Por primera vez en la historia, algunos diputados federales del PRI se armaron de valor y se atrevieron a poner sobre la mesa, al abandono y la falta de coordinación que existe entre el gabinete peñista, los delegados federales y los integrantes de la legislatura.

Los reproches provinieron de diputados de Chihuahua y Nuevo León, pero también la bancada poblana, en voz del diputado por Zacatlán, Lorenzo Rivera, le solicitaron al presidente de la República que haya más apoyo a sus solicitudes y que exista una mejor coordinación con el gobierno federal, que en el papel surgió del priismo.

Pero de poco o nada sirvieron las súplicas de los diputados federales del PRI, para dejarlos aún más helados de lo que ya estaban.

El presidente Peña les pidió que como leales soldados del sistema se preparan porque lo peor en materia económica está por venir, debido a que se llevará a cabo un recorte presupuestal con respecto a este año de 250 mil millones de pesos.

El impacto de esta medida en la economía del país será brutal, la generación de empleo es nula, debido a la mal llamada “reforma fiscal”, la economía del país se mueve a través del sector público con las obras del gobierno federal, pero ahora con los recortes presupuestales, la situación se ve francamente complicada.

Los diputados del tricolor están ante una situación difícil, pues tienen que hacer frente a los recortes presupuestales, pero también a los reclamos por el alza de las tarifas de la energía eléctrica y las gasolinas, lo cual tiene muy molestos a los ciudadanos.

La bancada del PRI en San Lázaro quedó en una situación muy complicada, tienen que apoyar la política implementada por el presidente de la República, pero también, como lo mencione en la pasada entrega, hacer ya frente al costo político que representa la baja popularidad del mandatario.

Denuncian los abusos de Guerrero y Benítez en el PRI. El famoso dueño del Porsche rojo que en plena campaña de Blanca Alcalá en las oficina del PRI de la Diagonal, Francisco Guerrero y Benítez, al parecer no entiende y sigue haciendo de las suyas.

Guerrero y Benítez, el administrativo del PRI, no solo se compró el Porsche rojo, producto de lo que se robó de la campaña con un valor de un millón y medio de pesos, sino que ahora también luce un Passat negro último modelo, el cual estaciona al lado del Porsche rojo.

Todo el personal del PRI de la Diagonal detesta a este déspota, quien llegó a trabajar al tricolor de la mano de su protector, José Antonio López Malo Capellini y desde entonces lo único que han hecho ambos personajes es acumular enemigos, pero principalmente Guerrero y Benítez.

Lo que indigna a los trabajadores del tricolor es que mientras Guerrero alardea y presume su riqueza, los trabajadores del “partidazo” enfrentan situaciones sumamente difíciles y con sueldos paupérrimos, además de que no hay ni siquiera papel de rollo en los sanitarios.

Guerrero también alardea contar con una casa de campo en Atlixco con alberca, la cual adquirió recientemente, seguramente como producto de lo que dejó la mal lograda campaña de Blanca Alcalá y sus secuaces.

Pero lo que es aún más indignante, es que este tipejo, Francisco Guerrero, utiliza a los trabajadores del PRI para que laven su auto, sin que haya una retribución de por medio, lo cual no tiene madre.

Por si fuera poco sus autos siempre están bajo la sombra, como si fuera dueño del estacionamiento, con unos conos impide el paso a su lugar de privilegio, mismo que ni siquiera los secretarios del comité directivo tienen.

Por supuesto y como todo déspota, Guerrero tiene sus favoritos a quienes protege a toda costa. Tal es el caso de Mario Tepox, un distinguido marinista a quien recientemente le acaba de asignar un sueldo de vente mil pesos, mismo que muchos secretarios no devengan y, sin que Jorge Estefan esté enterado.

Su otra consentida es la secretaria Yadira Sánchez Tejeda, quien gana quince mil pesos y nadie se explica porque. ¿O sí?

Recientemente nuestro héroe de la película se asignó una lujosa oficia con baño, que ninguna de los secretarios del Comité tiene, claro también goza de una moderna pantalla con cable e internet para su uso personal, mientras la perrada, como él llama a los empleados, incluidos todos los miembros de la dirigencia tienen que conformarse con un internet chafa y lento que no les permita realizar sus trabajos con la oportunidad y eficiencia del caso.

Recientemente, Guerrero inició una purga con todos los que no les son afines y así de pronto y en abierta violación a sus derechos laborales les rebajo el sueldo y les suspendió el seguro social y cuando algunos de los se dirigieron con él para preguntarle los motivos de tal decisión, la respuesta fue contundente: “¡Porque se me hincharon los… huevos!”

Me pregunto el por qué Jorge Estefan permite todos estos abusos de su empleado, el cual gana 50 mil pesos mensuales, más viáticos, gasolina y “gastos de representación”, ni hablar.

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