EPN admitió que pudo haber “mal citado”, pero “nadie me puede decir que plagié mi tesis”. Reiteró que era necesario dialogar con Trump y que México no pagará el muro que propone éste
Por Ángel Cabrera
En hora y media, Enrique Peña Nieto rompió con una tradición de casi 100 años, desde que en 1917 Venustiano Carranza instituyó el 1 de septiembre como fecha para informar el estado de la nación.
El mandatario dejó en la historia al Día del Presidente y el besamanos para dar paso a una comparecencia ante 300 jóvenes, a quienes respondió 22 preguntas, la mayoría realizadas por Facebook.
Respondió desde los cuestionamientos más light como ¿qué buenas noticias vendrán para los jóvenes?, realizada por el joven campechano Juan Luis López, hasta los cuestionamientos sobre las sospechas de que plagió su tesis de licenciatura, los gasolinazos, sus compromisos de campaña, su declaración patrimonial, la resistencia de la Iglesia a su iniciativa de matrimonios igualitarios y su encuentro con el candidato a la Presidencia de EU, Donald Trump.
Sobre la iniciativa para el matrimonio igualitario, el Presidente aseguró que “es una iniciativa que ha polarizado a distintos grupos, pero es importante reconocer el derecho que una persona tiene de vivir con alguien de su mismo sexo”, y señaló que espera que el proyecto “no quede archivado en un cajón” y sea votado de forma respetuosa.
Algunos de los cuestionamientos realizados por los jóvenes sirvieron para que el Presidente enlistara acciones de su cuarto año de gobierno, como la reducción de tarifas eléctricas y telefónicas, los 77 millones de pesos en becas y más de dos millones de empleos creados.
El periodista Ezra Shabot fue el encargado de leer las preguntas y moderar el encuentro; en una de sus intervenciones, aseguró que la pregunta más recurrente en Facebook fue por qué se había invitado a México a Donald Trump.
Peña Nieto resumió lo ya mencionado en el mensaje de Los Pinos, sus tuits y su artículo de prensa, pero en un momento trastabilló y confundió los apellidos de los dos candidatos a la Presidencia de Estados Unidos al decir: Hillary Trump. Ese desliz no causó inmutación en los jóvenes.
La mayoría de preguntas más incisivas provinieron de Facebook y sirvieron para que Peña respondiera a las polémicas más recientes de su gobierno: sobre su tesis reconoció que tuvo “errores metodológicos” al citar mal a los autores; de los gasolinazos, aclaró que prometió la reducción de tarifas eléctricas y de gas, pero nunca de los combustibles; de la presentación de sus declaraciones en la plataforma ciudadana 3 de 3, manifestó que se ceñirá a lo solicitado por la Función Pública.
Una joven de Oaxaca preguntó al mandatario de otro tema polémico: la CNTE y los bloqueos en el sur del país. El Presidente no se salió de la postura oficial y reiteró que no habrá diálogo con el magisterio disidente hasta que se retomen las clases.
El momento más tenso ocurrió cuando un joven, llamado José Ramón, pidió la palabra y enlistó los escenarios adversos del gobierno o, la nula credibilidad de los ciudadanos a los mensajes del mandatario y la poca rendición de cuentas. Con nerviosismo, pidió que la respuesta del Presidente no fuera coreografiada.
Peña Nieto recordó las acciones de su gobierno en el tema y señaló: “Como dice el eslogan que he manejado para esta campaña, las cosas buenas casi no se cuentan, pero cuentan mucho”, antes de concluir el diálogo.