Ignorancia supina  

Xitlalic Ceja García volvió a las andadas y lo hizo de la peor forma: retomó el lucro político de los feminicidios. La diputada federal del PRI se propuso como asesora del gobierno del estado para implementar la Alerta de Género en la entidad. El problema es que la ignorancia de la legisladora no tiene parangón, ya que el cumplimiento de las recomendaciones de la Conavim por parte de la gestión morenovallista hacen inviable la petición. Y, por si fuera poco, Ceja García nos debe una explicación de por qué ahora anda muy engallada con el tema, pero no dijo nada –siendo funcionaria– de las más de tres mil desaparecidas en el sexenio marinista. ¿Será?

 

No hay quién los pare

Los pejezombies poblanos no pueden ocultar los graves conflictos internos que enfrentan. La desbocada carrera rumbo a la elección del 2018 vino a polarizar los ánimos y enfrentar a los diferentes grupúsculos que coexisten en la franquicia poblana de Andrés Manuel López Obrador, quien, fiel al estilo de Carlos Salinas de Gortari, ni ve ni oye los pleitos que se traen sus empleados... perdón, sus líderes poblanos. Para colmo de males, Morena carece de un dirigente con la experiencia, el oficio y autoridad para meter en orden a los adelantados, lo cual radicalizó la pugna. ¿Será?

 

Los temores de Barbosa  

La reaparición en suelo poblano del coordinador del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado de la República, Luis Miguel Barbosa Huerta, no es gratuita. Su mensaje de que los morenovallistas están afiliando a “extraños” al sol azteca, con miras a la renovación de la dirigencia estatal, tiene como fondo el profundo temor de que se acaben sus más de tres lustros de control en el perredismo poblano. Y es que no es lo mismo que antes Barbosa arrasara en las elecciones internas por contar con el apoyo de Nueva Izquierda, a que los tenga como enemigos peligrosos que pueden sacarle la vuelta. ¿Será?

 

Fracaso electorero

Roxana Luna Porquillo, Ana Teresa Aranda Orozco y el PRI tienen en común una cosa: todos deberían despedir a sus representantes jurídicos porque sólo van de fracaso en fracaso en sus diferentes recursos electorales para impugnar el proceso del pasado 5 de junio. El nuevo descalabro se los propinó el Tribunal Electoral del Estado, que rechazó su petición de echar abajo la validez de la elección. Los magistrados determinaron que ninguno ofreció pruebas contundentes, es decir, fue más lo que denunciaron en los medios que lo que pudieron comprobar por la vía de los hechos. Con esos abogados, para que quiere enemigos la oposición. ¿Será?

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