En una competencia, drones del organismo efectuaron actividades en un contexto de simulación de un accidente en una plataforma petrolera que explotó e incendió
Por: Redacción
Foto: Cortesía INAOE
Inteligencia artificial, robótica y visión por computadora son tres de las líneas de investigación del proyecto científico Ráfaga, cuyo objetivo es desarrollar micro vehículos aéreos con vuelo autónomo y que, a casi dos años de haber comenzado, ya ha rendido frutos como el segundo lugar obtenido en una competencia internacional en China.
El proyecto es liderado por José Martínez Carranza, investigador del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), y es financiado por el Fondo Newton de la Royal Society del Reino Unido; busca crear drones con capacidades de vuelo autónomo, robustos a la pérdida o falta de señal de GPS y que puedan tomar decisiones inteligentes.
A través de un comunicado, el organismo informó que con algunos de estos desarrollos el equipo QuetzalCuauhtli concursó en la International Micro Air Conference and Competition que se realizó en el Beijing Institute of Technology en China (IMAV 2016), donde obtuvo un segundo lugar en la categoría de drones en interiores.
En la competencia, los drones efectuaron una serie de actividades en un contexto de simulación de un accidente en una plataforma petrolera que explotó e incendió.
“La idea era mandar una brigada de drones para desempeñar distintas actividades: llegar al área del desastre y sobrevolarla, generar un mapa de la misma, ubicar personas que hubieran saltado al mar y buscar el lugar donde tenían que dejar un salvavidas.
Uno de los drones tenía que bajar al mar y tomar una muestra del agua y otros tenían que entrar al edificio de la plataforma para generar un mapa del mismo, localizar unos objetos con material peligroso, tomarlos y depositarlos en un contenedor seguro y después salir. Todos estos drones debían partir de y regresar a una plataforma en movimiento. Ese fue el contexto de la competencia”, explicó Martínez Carranza.
Para esta competencia el equipo QuetzalCuauhtli del INAOE llevó tres vehículos de una plataforma que se llama Bebop 2, de la empresa Parrot.
“Los llevamos porque son pequeños, y esa era una de las cosas que premiaban. También utilizar plataformas para las que existe software y trabajar con esto en los drones que ya tienen cámaras, uno puede hacer cosas interesantes con esto. Nosotros participamos en la etapa de interiores que era el reto en el que los drones tenían que volar al interior de la plataforma, generar mapas y buscar objetos”, señaló.
Agregó que Ráfaga ha recibido el apoyo de la empresa mexicana Heliboss, distribuidor oficial de la empresa DJI dedicada al diseño y construcción de drones.
El equipo estuvo integrado además por Aldrich Alfredo Cabrera Ponce, Roberto Munguía Silvia y Leticia Oyuki Rojas, estudiantes del Instituto Tecnológico Superior de Atlixco (ITSA), además de Luis Manuel Valentín Coronado, quien realiza un postdoctorado en la Coordinación de Ciencias Computacionales del INAOE.