De acuerdo con Hacienda, Palmar de Bravo y Quecholac, municipios golpeados por la ordeña de ductos, forman parte de la región “bajío” de Pemex, donde se tienen las tarifas más elevadas para el combustible

 

Por Guadalupe Juárez  

Puebla contará con seis precios distintos por litro de combustible, de acuerdo a las zonas de distribución en las que fue dividido el estado. Palmar de Bravo y Quecholac, dos municipios con altos índices de robo de combustible, tendrán los precios más elevados a nivel nacional de gasolina Magna, Premium y diésel.

De acuerdo con la información publicada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP), ambos municipios pertenecen al conjunto de 29 demarcaciones de la zona que será conocida como distribución del “Bajío”, en la cual el litro de Magna se situó en 16.59 pesos, 18.36 para Premium y 17.66 para el diésel, la más alta del país.

El anuncio de la federación implicó incrementos de 2.61, 3.55 y 2.03 pesos respecto de las tarifas que imperaban hasta el 31 de diciembre.

Palmar de Bravo encabeza el grupo de municipios con mayor número de tomas clandestinas, situación que ha traído diversos enfrentamientos entre huachicoleros –personas dedicadas a la extracción ilegal del hidrocarburo– y elementos de Pemex, Ejército y de la Policía local.

De acuerdo con testimonios recabados por 24 Horas Puebla, antes de que aumentara el precio de las gasolinas, ya se comercializaba en esta zona entre 5 y 8 pesos el litro de Magna, Premium y diésel de forma ilegal, aunque sólo podían acceder las personas por recomendación de alguien más, para evitar ser identificados por las autoridades.

En Quecholac, otra de las demarcaciones con más robos de hidrocarburo en Puebla, se han registrado diversos incendios ocasionados por tomas clandestinas abiertas, que han explotado por la poca experiencia en la perforación de ductos, según relataron los mismos pobladores.

Lo anterior ha ocasionado que los habitantes de la zona protejan a los huachicoleros y prefieran apoyarlos en sus actividades ilícitas, ya sea porque sus familiares se dedican al robo o venta de la gasolina de forma clandestina o porque sus hijos son reclutados por las bandas de los también conocidos como chupaductos.

Por ello, la próxima administración estatal, encabezada por Antonio Gali Fayad, anunció una estrategia agresiva para combatir dicho ilícito, para lo cual pedirá apoyo tecnológico y más elementos policiales, según informó el gobernador electo el año pasado.

Otras entidades que también comparten las tarifas más altas de combustible en México son algunos municipios pertenecientes al Estado de México, Michoacán, Guerrero, Hidalgo y Nayarit, así como Veracruz, Oaxaca y Chiapas.

Los precios anunciados por la SHCP estarán en vigor hasta el 3 de febrero, fecha en la que anunciarán los nuevos ajustes, los cuales dependerán de cada zona establecida, con el objetivo de flexibilizar el costo por litro del combustible, según explicó el titular de dicha dependencia, Antonio Meade Kuribreña.

 

Así los costos en el estado 

Redacción

El gobierno federal, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, dio a conocer los montos por los dos tipos de gasolina y el diésel para la entidad poblana. No obstante, el reporte oficial sólo contempla 105 municipios de esta demarcación. El argumento de la variabilidad en precios es la accesibilidad para el traslado del combustible a las regiones más apartadas de la mancha urbana.

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Chupaductos venden el litro en ocho pesos

 Por Guadalupe Juárez

 Ante el incremento a los precios del combustible,identificado como gasolinazo, en la entidad poblana las personas dedicadas al robo de hidrocarburos mantienen, en promedio, a ocho pesos el litro de gasolina y dié-sel y aseguran que no van a elevar
estas tarifas.

De acuerdo con el diario Reforma, en el municipio de Acatzingo –una de las demarcaciones donde se reporta un mayor número de tomas clandestinas de todo el estado– los llamados huachicoleros ofrecen el combustible sobre la carretera a San Sebastián Villanueva.

Para esto, refiere la publicación, utilizan contenedores de gasolina vacíos sobre la vialidad para indicar que ahí comercializan el producto robado; sin embargo, la operación sólo es realizada a través de códigos manejados por los integrantes de las bandas delictivas.

El periódico de circulación nacional cita como fuente a una persona cercana a los chupaductos, quien revela que el mismo modus operandi es llevado a cabo en otras zonas de la entidad poblana.

Acatzingo forma parte del corredor de los huachicoleros en el estado, esta franja delictiva está conformada por 22 municipios, entre los que también aparecen Palmar de Bravo,  Quecholac y Tochtepec como los más afectados por esta actividad ilícita.

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