Los robos a tiendas de autoservicio y departamentales arrojaron cuantiosas pérdidas económicas, sin embargo hasta esta semana organizaciones de empresarios dieron a conocer el monto exacto
Por Serafín Castro
Pérdidas por más de 120 millones de pesos en mercancía robada y daños al mobiliario de los establecimientos afectados, así como “cifras millonarias incalculables” por el cierre del 80% de los negocios de la capital, son los montos a los que ascienden los daños por los saqueos de la semana pasada en Puebla.
A estas cifras de la Cámara Nacional del Comercio, Servicios y Turismo de Puebla (Canaco Servytur) se suman 250 millones de pesos de pérdidas reportadas por la Asociación de Centros Comerciales de Puebla, es decir, el monto preliminar asciende a 370 millones de pesos.
“Tenemos otro monto mucho mayor de pérdidas que representa cifras millonarias incalculables: el hecho de que el 80% de los negocios en Puebla hayan cerrado desde las 17:30 horas en uno de los días de mayor venta nos habla de la magnitud de pérdidas”, afirmó el presidente de la Canaco Servytur de Puebla, Marco Antonio Prósperi Calderón.
El 5 de enero pasado la capital poblana quedó paralizada luego de la psicosis generada tras un primer saqueo a la Bodega Aurrerá de Mayorazgo, como protesta por el gasolinazo. Las amenazas de robar otras tiendas se extendieron de manera inmediata a través de las redes sociales provocando el cierre de distintos centros comerciales y comercios de la ciudad.

“JUEVES negro”
“Para algunos negocios, el 5 de enero (previo al día de los Reyes Magos) es el día más importante de ventas de todo el año: hablamos de las tiendas de juguetes, panificadoras, pastelerías, tiendas deportivas, de ropa, zapatos, electrónicos y celulares, en fin, una infinidad de Negocios que se vieron afectados significativamente por no tener esas ventas”, indicó Prósperi Calderón.
Y eso no es todo. A decir del presidente de la Canaco Servytur, los daños aún no terminan.
Dado que el 95% de los pequeños comercios del Centro Histórico no registraron ventas durante los días 5 y 6 de enero, quedaron endeudados con la mercancía que habían adquirido, por lo que se estima que “una gran parte de estas empresas” no podrá liquidar y tendrán que cerrar sus negocios, generando pérdidas de empleos.
Por todo esto, el 5 de enero pasado ya ha sido nombrado por los empresarios poblanos como “el jueves negro” en la historia de Puebla debido a las pérdidas millonarias que representó.
“Ojalá que esto nos sirva y seamos mucho más inteligentes, menos manipulables y mucho más analíticos de nuestra situación; y sí, se vale protestar y se vale manifestarse, pero sin hacer daños a terceros”, remató Marco Antonio Prósperi.
Miembros de la iniciativa privada poblana han nombrado al pasado 5 de enero como “jueves negro” debido a los desmanes ocurridos.

