El ex titular de la SATI del municipio autorizó al final de su mandato un cuantioso aumento a hermanos de ex líder sindical
Por Mario Galeana
En los últimos días de gobierno municipal de Eduardo Rivera Pérez, el entonces titular de la Secretaría de Administración y Tecnologías de la Información (SATI) del Ayuntamiento de Puebla, Íñigo Ocejo Rojo, autorizó un escandaloso aumento salarial a los hermanos del ex líder sindical Israel Pacheco Velázquez.
El ex dirigente del Sindicato Único de Empleados y Trabajadores del Honorable Ayuntamiento de Puebla (Suethapip) fue detenido por el delito de extorsión apenas dos meses después de que Rivera Pérez culminara su gestión, en abril de 2014, y actualmente se encuentra preso en el penal de Cholula.
En 13 años como líder sindical, Pacheco Velázquez recibió más de 40 millones de pesos por cuotas y se presume que, con ello, acumuló propiedades y vehículos, mientras su familia realizaba viajes constantes al extranjero.
Su poder en la Comuna no tenía límites. Así logró también incluir en la nómina del Ayuntamiento a sus hermanos Javier, Andrés y Conrado Pacheco Velázquez, quienes, de un plumazo, recibieron un aumento salarial de alrededor de 34% del puño de Ocejo Rojo.
A los tres hermanos se les otorgó un incremento de seis mil 879 pesos de enero a febrero de 2014, cuando Ocejo Rojo y Rivera Pérez preparaban las maletas para ceder el lugar a la administración del entonces alcalde electo José Antonio Gali Fayad.
En un solo mes, los tres hermanos del sempiterno líder sindical pasaron de ganar 20 mil 185.24 pesos a 27 mil 55.03 pesos.
El escandaloso aumento supone un acuerdo entre Eduardo Rivera, Íñigo Ocejo e Israel Pacheco, que finalizó con la detención del ex líder sindical y la llegada de la nueva administración municipal, que rescindió de manera exprés los contratos irregulares.
Rafael Ruiz Cordero, el sucesor de Ocejo Rojo en la SATI, reveló en ese entonces a los medios el cúmulo de irregularidades en la nómina del Ayuntamiento, pues la actividad que realizaban los hermanos de Pacheco Velázquez era remunerada con un salario mensual de seis mil pesos, menos de la tercera parte que Rivera Pérez y Ocejo Rojo autorizaron durante tres años.
De hecho, Gali Fayad advirtió que Ocejo Rojo era investigado por la Contraloría a raíz de la inusitada autorización de incremento salarial que aprobó en los últimos días de su cargo.
“Hay una entrega-recepción como en cualquier dependencia. Cualquier anomalía que pudiera salir de este proceso, en su momento, tanto la Contraloría como las áreas correspondientes las estarán dando a conocer; no se ocultará ninguna información”, aseveró en esa ocasión.

Licenciatura patito
No fue, sin embargo, el único escándalo de Íñigo Ocejo durante su paso por la gestión de Eduardo Rivera Pérez.
Unos meses después de iniciar el gobierno municipal, una investigación periodística reveló que el flamante secretario de Administración y Tecnologías de la Información carecía de un título universitario para desempeñarse en el cargo.
Ocejo Rojo se ostentaba como licenciado en Alta Dirección de Empresas por la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), pero carecía de célula y título profesional.
A raíz de la revelación periodística, José Antonio Salazar Andreu, titular de la Unidad Administrativa de Acceso a la Información, reconoció que la cédula profesional se encontraba “en trámite”.
Un año después, Ocejo Rojo se tituló en el Colegio de Alta Dirección de Empresas, del cual era representante y socio mayoritario, hasta que la propiedad de la institución fue transmitida a otras tres personas.
