El ex líder del sindicato de trabajadores municipales doblegó a cuatro gestiones y usufructuó 42 mdp de las cuotas sindicales
Por: Berenice Martínez
Solo. Sin poder alguno. Sin aliados ni recursos, Israel Pacheco Velázquez intenta su última jugada: hacer presión para su liberación con el apoyo de 90 personas, entre ellos sus familiares y amigos.
Lejos quedó cuando era el amo y señor del sindicato “Benito Juárez” del Ayuntamiento, organización desde la que doblegó a cuatro presidentes municipales y usufructuó más de 42 millones de pesos.
Hoy, sus seguidores aseguran que se trata de un preso político. La realidad es que un largo y negro historial contradice la versión: desvío de recursos, extorsión, enriquecimiento inexplicable y el usufructo a favor de sus familiares son algunas de las denuncias que pesan en su contra.
Sin embargo, un dato ilumina sus últimas correrías: la relación que mantuvo con Íñigo Ocejo Rojo, integrante de El Yunque y ex funcionario de la administración de Eduardo Rivera Pérez, con quien logró beneficiar a sus hermanos.

Relación con alcaldes
Bajo el cobijo de la presidencia municipal de Mario Marín Torres en 2001 Israel Pacheco se fortaleció al ser nombrado líder sindical, posición con la que iniciaría una vida de lujos pagada, según versiones periodísticas, con las cuotas de los agremiados, por lo que volvió su dirigencia un cargo vitalicio desde 2007.
Las notas periodísticas de la época consignan que durante su trienio, el alcalde Luis Paredes intentó contrarrestar el poder de Pacheco, quien se había reelegido creando el Sindicato Independiente que luego fue disuelto por el priista Enrique Doger Guerrero, en cuya gestión (en marzo de 2005) el Tribunal de Arbitraje Municipal permitió la reelección del dirigente sindical y le autorizó agregar el nombre de sindicato “Benito Juárez García”.
Dos años más tarde, en 2007, Doger y el entonces gobernador Mario Marín Torres donaron al dirigente sindical el predio El Refugio, ubicado en San Francisco Totimehuacán, dádiva que sólo reflejó el primero de muchos que recibiría tras doblegar a las diferentes gestiones.
Por ejemplo, en 2010 la presidenta municipal del PRI, Blanca Alcalá aprobó donarle más de 10 mil metros cuadrados del polígono 15, manzana 42, de la unidad habitacional “La Margarita” con un valor de ocho millones 941 mil pesos a favor del sindicato.
Ese mismo año, por última vez la Comuna cedió a las pretensiones de Israel Pacheco con el otorgamiento de 94 bases, de las cuales 42 fueron para allegados de Alcalá Ruiz.
La fórmula para obtenerlo: marchas con familiares de los sindicalizados y el amago constante de huelgas en los diferentes departamentos de la Comuna. Situación que no funcionó con José Antonio Gali Fayad.
Denuncias en su contra
El delito de extorsión que llevó a la cárcel al ex líder no es el único en la lista de ilícitos que pudo cometer.
En 2016 la dirigencia del sindicato “Benito Juárez”, encabezada por Gonzalo Juárez Méndez, acusó a Pacheco Velázquez de haber cometido irregularidades financieras tras detectar que de marzo de 2013 a abril de 2014 recibió cuatro millones de pesos como parte de los ingresos, pero habría erogado 15 millones.
El señalamiento se sumaba al de Daniel Ortiz Acevedo, quien se hizo cargo del sindicato tras la aprehensión del “líder vitalicio” al indicar que aquél había desviado recursos, por lo cual presentó denuncia penal.
Las acusaciones en su contra datan desde la administración municipal marinista, en la que los naranjitas –los habría sometido a tratos verdaderamente indignantes– relataban que los obligaba a arrodillarse y besarles los pies y la mano al dirigirse a él, además de que se volvió obligatorio que los agremiados le regalaran en su cumpleaños una camioneta del año.
Incluso, en 2009 enfrentó una denuncia penal interpuesta por el presidente de la Asociación Poblana de Hoteles y Moteles, Gustavo Ponce de León Tobón, quien lo acusó de amenazas.
El Yunque e Israel Pacheco
A lo largo de 13 años logró que dos mil 500 agremiados aportaran cuotas para amasar su fortuna, además de colocar en la nómina a sus hermanos, Javier, Andrés y Conrado con una partida de 90 mil pesos mensuales, revelaron medios de comunicación.
Lo anterior sucedió durante el trienio del alcalde yunquista Eduardo Rivera, quien mostró respeto al ex líder vitalicio que cometió extorsión al interior del organismo gremial.
Otro personaje clave en la complicidad y abusos de Israel Pacheco es Íñigo Ocejo Rojo, entonces titular de la Secretaría de Administración y Tecnologías de la Información, quien operó los acuerdos de corrupción bajo la mesa.
Lo sorprendente es que ese funcionario es hijo de Jorge Ocejo Moreno, destacado militante de la ultra derecha poblana y cabeza de una de las familias custodiadas de la Organización Nacional del Yunque.
Uno de los excesos documentados por diversos medios de comunicación son los regalos millonarios de cumpleaños que el ex dirigente sindical exigía a sus agremiados, quienes con “cooperaciones voluntarias” juntaban de 850 mil a 1.5 millones de pesos.
Pero la opulencia no termina ahí. A veces el obsequio era un vehículo de lujo, cada 23 de agosto, los dos mil 500 sindicalizados del Ayuntamiento debían aportar de 350 a 600 pesos para su fiesta.
Así, cada año, Israel Pacheco se daba el lujo de tener en su convite a más tres mil invitados, comida de tres tiempos y grupos musicales.
Inclusive, en 2004 –durante la gestión de Luis Paredes– Pacheco recibió del sindicato un bono de 15 millones de pesos para “actividades culturales”, el cual era cubierto por la Comuna cada 15 de diciembre.
Dicho bono fue cobrado durante al menos 10 años, pero en una sesión de Cabildo de diciembre de 2008 el tema causó escándalo, pues la administración de Blanca Alcalá entregó el monto económico por 14.2 millones de pesos.
La alcaldesa fue acusada de hacer el depósito millonario a la cuenta bancaria del dirigente del sindicato de trabajadores de la Comuna, pero Pacheco Velázquez no reportó ningún movimiento ante el Sistema de Administración Tributaria (SAT) desde 2008 en relación a sus bienes y el manejo de recursos de las cuotas sindicales.
Excesos de familia
Los excesos de su esposa Gloria Guadalupe Mex y sus hijos los presumían en Facebook con fotografías de sus viajes a países como Francia, Italia y España.
Su hermana Juliana Pacheco, profesora de educación primaria, adquirió propiedades por casi cinco millones de pesos cuando su ingreso no le permitía construir edificios que cuestan 2.2 millones de pesos.
Después de revelarse los excesos de Israel Pacheco, en 2014 el entonces alcalde Antonio Gali Fayad pidió a las autoridades correspondientes investigar el enriquecimiento ilícito del dirigente sindical quien a lo largo de 13 años pasó de ser un empleado que no figuraba a un líder vitalicio dueño de casas, departamentos y vehículos de lujo.
Además de ser el cabecilla de los trabajadores destinaba recursos del sindicato para los viajes de su familia a Europa y desde su financiera Finamoney hacia transacciones a través de terceros.
Precisamente, en el gobierno de Gali Fayad, el 12 de abril de 2014 Pacheco fue detenido en Veracruz, luego que la Procuraduría General de Justicia (PGJ) giró una orden de aprehensión en su contra derivada de una denuncia por extorsión que interpuso Orlando López Reyes, quien fundó el sindicato “Ignacio Zaragoza”.
También López Reyes, como secretario de Finanzas del sindicato “Benito Juárez” interpuso la demanda de extorsión luego que el ex líder sindical se enterara que buscaba la dirigencia del Organismo Operador del Servicio de Limpia (OOSL), por lo que le pidió 200 mil pesos en un primer pago y 50 mil pesos mensuales a cambio de no hacer daño a su familia.
A Israel Pacheco le detectaron propiedades ubicadas en la ciudad de Puebla, vehículos último modelo y una cuenta con recursos por un millón 800 mil pesos.
Entre las riquezas comprobadas destacan una camioneta Cadillac SRX2010, un Jetta MKVI y una GM Cheyenne, nueve propiedades y la capacidad de pagar viajes a Europa con su familia todo el año.
Lo alarmante de las indagaciones encontradas por las autoridades fue que los lujos no correspondían al sueldo de 38 mil pesos mensuales que el ex dirigente sindical percibía.
Lo anterior fue producto de una auditoría que se realizó a Pacheco Velázquez por parte del Registro Público de la Propiedad (RPP) y de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
La caída del líder vitalicio
El 18 de abril de 2014 el juez penal de Cholula dictó auto de formal prisión en contra de Israel Pacheco por el delito de extorsión, considerado en Puebla como grave y que no alcanza fianza.
Hace tan sólo tres años presumía a miles de seguidores del Sindicato “Benito Juárez” del Ayuntamiento, pero hoy sólo le quedan 90 entre amigos y compañeros que lo defienden y piden su liberación.
A Israel Pacheco su proteccionismo priista no le bastó y llegó al extremo de unirse a organizaciones como la 28 de Octubre y el Frente Popular Revolucionario que en su momento lo catalogaron como preso político, afirmación que se sostiene en blogs y cuentas de redes sociales de ambas organizaciones.
Actualmente, el oriundo de Juchitán (Oaxaca) se encuentra recluido en el penal de Cholula sin que hasta la fecha se le haya dictado sentencia por los delitos que cometió.
El músculo de un cadáver político





