La Entrega
Por Adrián Ruíz
La decisión de erradicar a la delincuencia organizada de Puebla de parte del gobernador Tony Gali, empezó a dar resultados positivos. Los certeros golpes asestados en los casi 3 meses de su gestión en la zona del ex triángulo rojo –se convirtió en un corredor-, inclinan la balanza a favor de las autoridades poblanas. Lo líderes de los grupos Zetas y cártel de Jalisco, quienes dominaban el territorio decidieron abandonar la misión.
El gran negocio que representó la ordeña de ductos de Pemex, la extorsión y secuestro donde están involucrados la delincuencia organizada, habitantes y autoridades de los lugares y personal de Pemex, ha sufrido mermas considerables y detenciones de gente de segundo rango. La situación para quienes invirtieron en tecnología, recursos humanos y materiales dejo de ser atractiva.
El centro de capacitación que se localizaba en los límites de Puebla y Veracruz, justo en el municipio de Esperanza, fue desmantelado y abandonado. En el lugar enseñaban a perforar los ductos de Pemex, que tienen un alto grado de dificultad y deben hacer en los momentos precisos en los que circula el combustible.
Se requiere del “pitazo” de personal de Pemex para extraer el combustible. Lo mismo herramienta especializada que debe manejarse con extrema precaución para evitar una explosión de graves consecuencias.
La inversión de los delincuentes fue millonaria. Aunque menor a las ganancias obtenidas durante los 2 últimos sexenios en los gozaron de total impunidad. La llegada de Tony Gali, cambió el panorama. En principio creyeron que la declaratoria de guerra era una llamarada de petate y medida populista.
Cuando se suscitaron los primeros decomisos y detenciones, dijeron a la gente que utilizan para la venta que se trataba de que el gobernador quedará bien con los poblanos. Luego las cosas volverían a la normalidad. Por lo que los invitaron a ofrecer el producto robado a la luz pública y sin temor.
El descaro llegó a tal grado de que en tianguis de los lugares del corredor se vendían tambos de 10, 20 y 30 litros de gasolina a 8 o 9 pesos. Tarde se percataron que la decisión del gobernador Tony Gali, no tenía vuelta de hoja. Los decomisos se incrementaron.
Y el gobernador apretó más la tuerca al solicitar y lograr la colaboración de elementos del ejército mexicano. Sólo entonces los líderes de la delincuencia organizada decidieron abandonar Puebla. La batalla no se va ganando. Las mermas económicas y humanas han sido considerables.
Quiénes persisten en actuar al margen de la ley pagarán las consecuencias. La protección de los altos mandos delictivos de la que gozaban ya no están en Puebla. El riesgo es mayor y los involucrados están identificados.
Incluso se tienen en “capilla” por lo menos 3 gasolineras que venden combustible robado. También deberán responder ante las autoridades por su proceder. Lo mismo los “propietarios” de automóviles lujosos de modelos recientes que circulan en los municipios del ex triángulo y que están reportados como robados.
La atención directa del gobernador poblano en el combate a la delincuencia organizada que afecta a Puebla y los poblanos es permanente. A diario pide reportes de la situación a los cuerpos de seguridad pública. Está decidido a ejercer el poder a favor de quienes lo eligieron.
Para Tony Gali hubiera sido cómodo tirarse a la hamaca y gozar el corto periodo como gobernador. Dejar correr el tiempo y evitar la bronca que representa enfrentar a grupos delictivos peligrosos. Si sus antecesores no quisieron tomar al toro por los cuernos. El ahora gobernador de Puebla, decidió velar por la tranquilidad de los poblanos.
El paso está dado y en ese tenor gobernará hasta el último día de su mandato.
Reporte del Informante
Contrario de otras ciudades la de Puebla está lista para enfrentar la temporada de lluvias sin riesgos de inundaciones. El trabajo de Luis Bank al frente del ayuntamiento, empezó a notarse con las primeras precipitaciones pluviales. El alcalde poblano escucho la voz interior que le aconsejo y bien ponte a trabajar y deja para para después las aspiraciones políticas.
El sabio consejo de la voz dio los primeros resultados positivos. Sin alarde ni reflectores, supervisó los trabajos de limpia de calles, barrancas y drenaje de la ciudad, para dar seguridad a los capitalinos.
La prevención para evitar inundaciones es un punto que deberá anotarse a favor del alcalde Bank. La primera lluvia intensa caída en la capital del lunes y madrugada del martes pasado, ninguna afectación provocaron en la ciudad. El reporte de saldo blanco es mérito del presidente poblano y todos los que intervinieron en la limpieza.
De acuerdo con los reportes del clima la ya inminente temporada de lluvias será intensa en el estado de Puebla y la capital. La ciudad que gobierna Luis Bank, está preparada para la contingencia ambiental.
Mientras otros personajes se tiran al piso y gastan recursos económicos en campañas para promocionarse como candidatos a puestos políticos, el alcalde de Puebla, invierte su tiempo en trabajo que no se ve pero se nota a la hora buena y eso los ciudadanos lo saben valorar.
Luis Bank, eligió el camino correcto el de trabajar.
