El dirigente del albiazul no sólo perdió la elección en el Estado de México, también la de Nayarit, pese al triunfo de Antonio Echevarría, que le corresponde al ex gobernador Rafael Moreno Valle, de acuerdo con una publicación del semanario Proceso

Por: Redacción

El presidente del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya Cortés, no sólo perdió la elección del domingo pasado en el Estado de México, también la de Nayarit, a pesar del triunfo del panista Antonio Echevarría García.

La victoria del albiazul en la entidad costera le corresponde al ex mandatario de Puebla, Rafael Moreno Valle, quien como delegado especial por AN operó la campaña política de Echevarría para convertirse en gobernador.

Fiel al ideal de entablar alianzas, Moreno Valle logró unir a la causa a los partidos de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y de la Revolución Socialista (PRS).

Así, Echevarría García gana –hasta este momento– por un margen de 12 puntos porcentuales con el 98.39 por ciento de las actas computadas; al cierre de las 18:00 horas del 5 de junio, el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) en Nayarit daba como vencedor al panista con el 38% de la elección, 178 mil 107 sufragios por 123 mil 572 del priista Manuel Humberto Cota Jiménez, casi el 27% de la votación.

Lo anterior se desprende de una publicación del semanario Proceso en su portal web, donde refiere que Moreno Valle tuvo un aliado de facto. Se trata de Jordi Segarra, quien fungió como asesor cuando era gobernador de Puebla, pero que en los comicios de Nayarit manejó la campaña de Cota Jiménez.

El PRI –explica Proceso– daba como perdida la elección en aquella entidad luego de los escándalos de narcotráfico en los cuales estuvo involucrado el gobierno de Roberto Sandoval Castañeda y el fiscal Édgar Veytia Cambero, señalado y detenido por el trasiego de heroína, cocaína, metanfetaminas y mariguana.

Los del tricolor sumaron a su campaña a Segarra, quien había sido el estratega de Gustavo Madero para convertirse en dirigente del albiazul y de Gabriel Quadri en 2012 como candidato presidencial; grave error.

A dos semanas de la elección, en el segundo debate de candidatos programado para el 22 de mayo, Cota Jiménez había preparado una serie de documentos contra su adversario, mismos que debió guardar por consejo de Segarra.

“La información sobre sus empresas, sus empleos creados en Nayarit, subcontrataciones outsourcing y otras cifras sobre su actividad empresarial obligarían al candidato panista a responder, cuestionado en su principal argumento de campaña”, publicó Proceso.

Con la información bajo el brazo que nunca reveló, Cota Jiménez llegó derrotado al 4 de junio y Moreno Valle se alzó con el triunfo de Echevarría García sobre Anaya Cortés, quien había anticipado también la victoria en Coahuila, la cual aún no está definida. Así, sería sólo un triunfo para el PAN, obra no del líder nacional, sino del ex gobernador.

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