El pegue de Jiménez Merino
Ahora resulta que a Alberto Jiménez Merino no sólo le coqueteó Morena, sino varios partidos de “izquierda” y de “centro” que se peleaban por tenerlo en sus filas, aunque se negó a revelarnos el misterio de quiénes veían en él a un excelente elemento político. Según, cada que le hacían una oferta inmediatamente les informaba a los dirigentes del PRI que se lo querían llevar, pero nunca pidió un cargo público para no irse del tricolor. Esto nos hace preguntarnos: ¿A qué partidos les interesa el ex delegado de Sagarpa? ¿Acaso al decir que eran más partidos los que estaban interesados en él, le valió un lugar en el servicio público? ¿Será?
Zepeda frena a Barbosa
Juan Zepeda vino a Puebla a reagrupar al PRD y evitar que el senador Miguel Barbosa lo desfonde. El candidato perredista en la pasada elección mexiquense no se cansó de repetir que, sólo mediante la unidad es posible que se obtengan triunfos electorales. Zepeda se encargó de hablar de todos los errores de Morena y, en cambio, fue más suave con los perredistas que impulsan una alianza con el PAN, coalición que él no descartó para 2018. Quienes hicieron mucha bilis, nos cuentan, fueron Socorro Quezada y Roxana Luna, quienes esperaban que él se lanzara contra Moreno Valle. ¿Será?
El regreso del Poder Antigandalla
Llama la atención que el grupo de Poder Antigandalla, el cual buscaba replicar el modelo de la Ciudad de México de retirar bienes mostrencos de la vía pública y hasta lanzar jitomatazos a políticos, haya tenido tan poco éxito en la capital poblana a pesar de que en sus primeras jornadas obtuvieron la atención de autoridades y de diversos medios de comunicación. Según sus integrantes, su ausencia –que acabará en los próximos meses en un tour que harán aquí– se debió a que “dedicaron a sus vidas personales” y porque ya no habían detectado gandallas en la ciudad. ¿Será?
El nepotismo judicial
Vaya exhibida que se llevaron los jueces y magistrados federales de Puebla por parte de Mexicanos contra la Impunidad y la Corrupción. Resulta que la organización ciudadana reveló en un informe que la mitad de los 66 integrantes del Sexto Circuito del Poder Judicial de la Federación, que se ubica en Puebla, metió a sus padres, hijos, ex novias y ¡hasta suegras! a trabajar con ellos. Se trata de 450 familiares que hoy ocupan un privilegiado lugar en la nómina de los tribunales federales. El nepotismo, dicen, se ha colado a la cocina de la justicia. ¿Será?
