Redacción
Hace un par de décadas en Europa y Norteamérica comenzaron a desaparecer abejas y abejorros. Algunas especies, incluso, fueron declaradas en peligro de extinción. Esta situación provoca daños serios al ecosistema.
Sin embargo, hay otros insectos que desarrollan la misma función: mariposas, moscas y escarabajos. Uno de ellos es la abeja Melipona, objeto de estudio de Dulce María Figueroa Castro, investigadora de la Facultad de Ciencias Biológicas de la BUAP, quien pretende retomar su papel en la conservación ecológica.
Las Melipona, o sin aguijón, producen una miel apreciada por sus cualidades curativas y nutricionales. Desafortunadamente fue desplazada por la abeja europea (Apis mellifera) que se introdujo en México en el siglo XVIII y que se multiplicó a finales del XIX.
Para este fin, la académica trabajará de manera coordinada con un grupo de locatarios de Cuetzalan, el cual mantiene colmenas de dos especies de Melipona, pero desconoce la biología de las mismas. Un proyecto similar también se pondrá en marcha en Hueytamalco.
Figueroa Castro indicó que durante el desarrollo de esta investigación se conocerá el tipo de flores que prefieren estas abejas silvestres y su proceso de forrajeo, entre otros aspectos de su comportamiento.

