El inútil enojo de Barbosa

El senador del PT-Morena Luis Miguel Barbosa Huerta denunció que la designación de Juan Carlos Lastiri Quirós como enlace del gobierno federal para la reconstrucción tras el sismo del 19-S tiene tintes políticos-electorales, ya que el funcionario priista está más que puesto para convertirse en el candidato del tricolor a la gubernatura en 2018. El legislador no debería andar de enojón, se le olvida que si existe un producto electoral totalmente fallido es precisamente el subsecretario de la Sedatu, quien lleva más de dos años en campaña a costa del erario y no ha podido pasar de los dos dígitos en las preferencias electorales. ¿Será?

 

El PES dice que va solo

Hace unos días, el Partido Encuentro Social –sí, es un partido y tiene registro por si usted lo dudaba– realizó su asamblea estatal, donde 84% de los delegados rechazó que vayan en alianza con cualquier otro instituto en la elección de 2018. El movimiento, que parecería normal, tiene toda la pinta de dados cargados, ya que el dirigente estatal Raúl Barranco Tenorio se anda promocionando como candidato a la gubernatura. La duda mata: ¿Si en alianza el PES no pudo sacar el mínimo de votos, ahora que va solo realmente podrá? ¿Será?

 

San Alejandro y el predio

Ahora que despidieron con mariachi y globos la vida útil del Hospital Regional #36, mejor conocido como San Alejandro, hay que aclarar que únicamente la Torre Médica sufrió un daño estructural que impide seguir con su uso, no así el área de Urgencias y Consulta Externa. Por lo mientras, el Ayuntamiento de Puebla, encabezado por Luis Banck Serrato, ofreció un inmueble ubicado sobre el periférico ecológico para la reubicación del nosocomio. La propuesta está siendo valorada porque también hay otros predios que son susceptibles para dar alojo al hospital. ¿Sérá?

 

La bronca que viene

Jorge Benito Cruz Bermúdez no tuvo de otra más que reconocer que el Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos que dirige no tiene la capacidad para hacer frente a la demanda de los peritajes que requieren las instituciones escolares públicas y privadas, ni evaluar los daños de los más de mil 200 planteles con reportes de afectaciones. Las tareas suenan complicadas y a ello se suma la pregunta de si Protección Civil, tanto municipal como estatal, también tiene la capacidad para ofrecer los dictámenes que requieren las escuelas para regresar a sus actividades. ¿Será?

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