Se determinó que la escritora y periodista fue agredida física y psicológicamente en su traslado de Quintana Roo a Puebla
Staff 24 Horas Puebla
José Montaño Quiroz, uno de los policías ministeriales involucrados en la aprehensión de la escritora y periodista Lydia Cacho, en diciembre de 2005, fue sentenciado a cinco años y tres meses de prisión, condena que determinó el Juzgado Segundo de Distrito con sede en Quintana Roo.
En un comunicado de prensa, la Procuraduría General de la República (PGR) informó que mediante la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) logró la sentencia para el ex agente por el delito de tortura en contra de la también activista.
“El Juzgado Segundo de Distrito con residencia en esa entidad (Quintana Roo) determinó imponer una condena de cinco años y tres meses de prisión al imputado por su responsabilidad en el delito de tortura durante el traslado de la periodista a Puebla provocándole violencia física y psicológica a causa de su labor periodística y ejercicio de la libertad de expresión”, detalló la dependencia.
En abril, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) atrajo un amparo presentado por Cacho Ribeiro contra una orden judicial que buscaba carearla con Montaño Quiroz, uno de los policías ministeriales que la detuvieron y torturaron en diciembre de 2005, luego de revelar una red de pornografía infantil encabezada por el empresario de origen libanés Jean Succar Kuri y que supuestamente involucraba también a Nacif Borge.
El máximo tribunal del país analizó el recurso promovido por la periodista tras considerar que éste se vinculaba con los derechos y normas de protección que deben regir en casos relacionados a víctimas de tortura.
La decisión de la Corte surgió por el análisis sobre las afectaciones emocionales o psicológicas que podría generar a las víctimas un careo con los victimarios, lo cual derivaría en una revictimización de lo acontecido.
Ese mismo mes, Cacho Ribeiro publicó en su columna Lado B una carta dirigida al agente ministerial, en la cual aseguraba que su tortura había sido “ordenada por el ex gobernador de Puebla, Mario Marín Torres, y avalada por integrantes de la cúpula del PRI nacional en convivencia con la red de empresarios pedófilos”.
El 16 de diciembre de 2005, Montaño Quiroz, así como Raymundo Rodríguez Rocha y Jesús Pérez Vargas, agentes de la entonces Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Puebla, detuvieron a Cacho en Cancún para trasladarla hasta la Angelópolis, después de que Nacif Borge presentara una denuncia en contra de la periodista por los delitos de difamación y calumnia.
En su libro Los demonios del Edén, la activista documentó los nexos entre Succar Kuri, Nacif Borge y una supuesta red de pederastia y pornografía infantil.
Durante su traslado de Quintana Roo a Puebla, Cacho Ribeiro fue torturada y amenazada de muerte supuestamente por los policías ministeriales.
En febrero de 2006, el periódico La Jornada difundió una grabación telefónica entre el entonces gobernador Mario Marín y Kamel Nacif Borge, donde el ex mandatario poblano narra al empresario las condiciones bajo las cuales la periodista fue apresada.
A finales de 2014, el 15 de diciembre, José Montaño Quiroz fue detenido e ingresado a un centro penitenciario del estado de Quintana Roo.
