Las Serpientes
Por Ricardo Morales Sánchez / @riva_leo
No me gusta decir se los dije, pero se los dije: ¡ojo con Movimiento Ciudadano!, el partido político que más puede crecer en 2018.
El fin de semana pasado estuvo en Puebla el coordinador nacional de MC, Dante Delgado Rannauro, quien puso en marcha 152 comités municipales constituidos por el coordinador estatal, el ex priista Fernando Morales Martínez, quien se ha dado a la tarea de comerse a lo que aún queda de la estructura del tricolor en el estado.
Fernando resultó un hábil operador político, quien ha comenzado a demostrar que no en balde fue dirigente estatal del PRI y también ha sabido sacarle provecho a la estructura que su padre y sus tíos conformaron en el estado.
Esta mezcla, más el apoyo incondicional que el gobernador Tony Gali le dio a esta fuerza política, hace que Movimiento Ciudadano amenace con convertirse en el partido político de mayor crecimiento.
Créanme, no exagero si le digo que Movimiento Ciudadano en Puebla puede convertirse en los próximos años en algo como lo que ocurrió en Jalisco, entidad donde hace tan sólo 10 años no existía este partido y ahora gobiernan la capital, Guadalajara, con Enrique Alfaro a la cabeza y ganaron toda la zona conurbada, incluido también Puerto Vallarta, lo cual tiene a este organismo en la antesala de ganar su primera gubernatura.
La fórmula que ha aplicado Morales es sencilla, llega a los municipios, los que conoce a la perfección, busca a los líderes locales, habla con ellos y les ofrece pasarse a Movimiento Ciudadano, partido que va a ir en 2018 en alianza con el PAN y el PRD, además de otras fuerzas, al menos en Puebla.
Fernando pone sobre la mesa el ser candidato del PRI, partido que se encuentra en dificultades en el estado, o ser candidato de Morena, que cuenta sólo con la fuerza de López Obrador, o ser candidato de Movimiento Ciudadano, partido que además es, como ya lo dije antes, el consentido del gobernadorJosé Antonio Gali Fayad.
Como parte de esta gira de trabajo por Puebla, Dante Delgado se reunió con el gobernador de Puebla y sellaron varios acuerdos que se verán próximamente.
Después se realizó en el Centro Mexicano Libanés una comida más que significativa, que deja en claro por qué Movimiento Ciudadano se convertirá en una fuerza política importante en 2018.
Basta revisar la mesa principal y la lista de empresarios invitados para arropar a Dante Delgado, quien se sintió más que a gusto en en la entidad poblana.
El dirigente nacional estuvo flanqueado por el empresario Eduardo (Lobo) Henaine, el hombre más cercano al gobernador Gali y por Edy Gali, hermano del mandatario, por si había alguna duda de los afectos del actual titular del Ejecutivo en Puebla.
También estuvieron presentes el empresario de la construcción Mario Henaine, el sobrino del mandatario y que también lleva su nombre, Tony; el empresario José Canales, también cercano a Gali, así como Rodrigo López Saniz de Juambelz y el ex diputado federal Julio Lorenzini, quien también coqueteó con Morena, entre otros.
Los eventos también dejaron constancia del papel que jugará Movimiento Ciudadano –antes Convergencia– en el estado, partido político que nunca había tenido este esplendor ni poder de convocatoria, pese a que por sus filas pasaron personajes de la talla de Luis Maldonado Venegas, Eukid Castañón Herrera, Fernando Manzanilla, Gerardo Tapia o Ángel Ceballos, todos ellos del primer equipo del entonces gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.
En Puebla abarrotaron el Auditorio de la Reforma y ni se diga de la recepción en Tepeaca o Cholula, municipios que fueron parte de esta gira de trabajo.
LA TRAICIÓN DE EDGAR SALOMÓN
El que al parecer no aprende la lección es el ex líder del Congreso local, Edgar Salomón Escorza, ex protegido de quien fuera candidato del PRI a Casa Puebla, Javier López Zavala.
Edgar se caracterizó por sus escándalos durante su paso por la Legislatura local, enloquecido por el poder, el alcohol y el sexo.
En su expediente se encuentra archivada una denuncia por abuso sexual, la cual nunca fue aclarada.
Torpe políticamente hablando, este personaje no tardó en traicionar también la confianza del gobernador Gali, ya que el pasado fin de semana se presentó a un evento acompañado por el líder de los tianguistas de San Martín Texmelucan, un personaje de muy dudosa reputación, de nombre Manuel Valencia.
Valencia se opone a la reubicación del tianguis de San Martín y es un franco opositor a la medida que impulsa el Ejecutivo estatal, además de que ha sido protagonista de una serie de enfrentamientos con otras organizaciones.