Staff 24 Horas Puebla
La Fundación de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap) trasladó su sede a Guadalajara, Jalisco, lo cual podría coincidir con el posible fraude por 720 millones de dólares que la Fundación Mary Street Jenkins otorgó a la Fundación Bienestar de la Filantropía.
De acuerdo con el portal e-Consulta, el cambio se concretó supuestamente en marzo de 2015 y un año después quedó asentado en el Registro Público de la Propiedad de Jalisco.
La empresa que se fundó el 20 de diciembre de 1985 ante José Luis Vázquez Nava, notario público 26 de la capital poblana, con el fin de donar becas a los estudiantes de la Udlap, así como administrar a la universidad, cambió sus instalaciones al estado de Jalisco luego de que el patronato lo determinara tras una sesión del 2 de diciembre de 2014 en la Ciudad de México.
En aquella asamblea estuvieron presentes Guillermo Jenkins Anstead –hoy fallecido– y Elodia Sofía de Landa de Jenkins, así como Roberto Jenkins de Landa, Juan Guillermo Eustace Jenkins y Margarita Jenkins de Landa.
Víctor Manuel Delgado Márquez, notario público 137 de Guadalajara, formalizó el movimiento emprendido por la Fundación Udlap, donde también se estableció que Jenkins Anstead y su esposa, así como Roberto y Juan Guillermo, se retiraban de manera temporal como patronos de la asociación.
De este modo, Juan Carlos Jenkins de Landa fue nombrado presidente y Margarita Jenkins de Landa vicepresidenta del patronato; mientras que María Elodia Jenkins de Landa quedó como tesorera; y Óscar Michel Márquez y Cristina Isabel Amieva Gálvez como vocales.
Según el semanario Proceso, el cambio de lugar representaría una maniobra de tipo legal para bloquear la recepción de notificaciones dentro del juicio que se sigue por un presunto fraude millonario al interior de la familia Jenkins.
En julio, el mismo medio reveló un supuesto fraude por 720 millones de dólares que la Fundación Jenkins habría donado a su par Bienestar de la Filantropía.
Guillermo Jenkins de Landa, miembro expulsado del patronato, presentó pruebas de cómo la otra asociación recibió dicha cantidad y cambió su sede de Aguascalientes, donde tenía sus oficinas, a Barbados y de ahí se mudó a Panamá.

