El desalojo de propiedades fue una característica en la administración de Roberto Borge Angulo en Quintana Roo; el pasado 9 de octubre se hizo justicia, luego de tres años, a los dueños de tres hoteles
Traspatio
Por Luis Pavón / @pavonlui
“Aquí estamos en la entrega del hotel Puerta del Cielo…” se escucha en un vídeo entregado a este reportero.
Un despliegue policiaco montado por el gobierno de Quintana Roo acompañaba a empleados de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje de Playa del Carmen que fueron a recuperar tres hoteles de Tulum que en 2014 fueron despojados a sus dueños.
“Buenos días. Estamos aquí para tomar posesión del inmueble. Tienen que desalojar” dijo un empleado de Conciliación y Arbitraje al encargado de “seguridad” del hotel Puerta del Cielo.
“Mmm… desalojar, permítame” respondió el custodio del hotel.
Era el lunes 9 de octubre del 2017. Habían pasado tres años y por fin se había hecho justicia. Un juez de Distrito revirtió lo que ilegalmente entregó el gobierno de Roberto Borge Angulo.
Basta recordar las escenas que vimos en mayo de 2014: turistas europeos, estadounidenses, mexicanos, de cualquier parte del mundo que pasaban sus vacaciones en Tulum, Quintana Roo, fueron obligados a salir de los hoteles donde se hospedaban.
Caminaban en la calle con sus maletas, sin rumbo, sin tener idea a dónde ir; ninguna autoridad se acercó a ellos para asesorarlos o brindarles apoyo.
Las vacaciones de ensueño se volvieron una pesadilla. Habían pagado mucho dinero, los hoteles en Tulum no son nada baratos.
El gobierno de Quintana Roo que encabezaba Roberto Borge, hoy detenido en Panamá, actuó como si no pasara nada.
El despojo de propiedades fue una característica en la administración de Borge.
Una sentencia de la Junta Especial Número 2 de Conciliación y Arbitraje, en Quintana Roo, había ordenado desalojar tres hoteles para entregárselos a los nuevos propietarios. Los dueños de esos inmuebles fueron despojados sin previo aviso.
En Quintana Roo no se movía la hoja de un árbol sin la voluntad del gobernador.
Era mayo de 2014 cuando un grupo de hombres armados acompañado de policías estatales se presentó en tres hoteles de Tulum para tomar posesión de los inmuebles.
Los dueños de tres hoteles fueron despojados de sus propiedades mediante juicios laborales apócrifos.
Omar Homero Tijerina Herrera y Samuel Aguilar Ibarra se hicieron pasar por empleados de los hoteles y alegaron ser víctimas de maltrato patronal, por eso interpusieron dichas demandas.
En el juicio 138/2012 tramitado ante la Junta Especial Número 2 de Conciliación y Arbitraje, argumentaron haber sido despedidos de manera injustificada y tener un salario diario de 32 mil 441 pesos. Es decir, 973 mil 239 pesos mensuales, casi un millón.
La demanda la interpusieron contra Carlos Amador Treviño Lozano y Julio César Pizano Lázaro, supuestos dueños de las tierras ejidales donde se ubican los hoteles Puerta del Cielo y Playa Azul, en Tulum.
El acuerdo de la Junta de Conciliación y Arbitraje, que forma parte de la Secretaría del Trabajo, fue darles los hoteles como pago por su despido laboral. Sin embargo, los demandados no eran los verdaderos dueños de los hoteles, es por eso que los propietarios reales nunca se enteraron que había demandas en su contra. Supieron de la demanda laboral hasta que personal de Conciliación y Arbitraje les fue a notificar el desalojo.
Con lujo de violencia, tanto dueños como turistas fueron sacados de los hoteles.
Los nuevos “dueños”, es decir, los falsos empleados resultaron ser unas fichitas en el mundo de los fraudes.
Omar Homero Tijerina Herrera y Samuel Aguilar Ibarra, quienes durante tres años tuvieron la posesión de los hoteles, cuentan con antecedentes penales.
Información recabada por los hoteleros afectados, con datos de Plataforma México, indica que Samuel Aguilar Ibarra fue investigado en 2012 por fraude.
En el caso de Omar Homero Tijerina Herrera, oriundo de Tamaulipas, ha estado dos veces en prisión. Se le han abierto averiguaciones previas por los delitos de homicidio, daño en propiedad ajena, fraude y robo.
Los hoteleros afectados no se quedaron de brazos cruzados y emprendieron una batalla jurídica en tribunales. Acusaron a la Junta de Conciliación y Arbitraje de complicidad.
Un juez les dio la razón y ganaron el amparo. El lunes 9 de octubre recuperaron sus hoteles después de tres años.
Los mismos empleados de Conciliación y Arbitraje que se los habían quitado fueron quienes se los restituyeron.
Los señalamientos contra funcionarios de la Secretaría del Trabajo de la administración de Borge son investigados por el actual gobierno de Quintana Roo.
La Secretaría del Trabajo del gobierno que encabeza el ex priista Carlos Joaquín González presentó cinco denuncias penales por el despojo de hoteles en Tulum y también de varios departamentos de lujo en Cancún, mediante 15 juicios laborales apócrifos cuando Roberto Borge era el gobernador.
Entre los investigados se encuentran los ex titulares de las Juntas de Conciliación y Arbitraje de Cancún y Playa del Carmen, así como el ex secretario estatal del trabajo Patricio de la Peña Ruiz de Chávez.
En el caso de Cancún, fueron 23 departamentos de lujo en la zona conocida como Torre Maioris también arrebatados a sus dueños bajo el mismo método: falsos empleados que interpusieron demandas laborales.
El apoderado legal del complejo habitacional Francisco Simán, quien ha sido contrademandado, me dijo que los departamentos fueron adjudicados a cinco personas que dijeron trabajar en ese complejo habitacional como jefe de grupos, puesto que no existe en el organigrama, y que argumentaron haber sido despedidos de manera injustificada.
Dichos departamentos también ya fueron recuperados.
Sólo que la historia de despojos en Quintana Roo aún no termina.
