Las Serpientes

Por Ricardo Morales Sánchez /@riva_leo

Muy polémica resultará la elección de los nuevos integrantes del Sistema Anticorrupción de Puebla, el cual desde la integración del comité encargado de seleccionar a los integrantes era puesto en tela de juicio.

Si bien es cierto que difícilmente se les puede dar gusto a todos, de acuerdo con la información que difundo hay perfiles que por sí mismos causan controversia.

Aunque se reunirá el comité seleccionador, ha trascendido que hay algunos integrantes que habrían obtenido el visto bueno, entre estos se menciona a: Alejandro Necoechea Gómez, Necocho, quien fue presidente del Instituto Electoral del Estado (IEE), y se perfila para convertirse en el presidente de dicho organismo, “háganme favor”.

Necocho en su sobrenombre lleva la fama, de entrada es cómplice del grupo político-mediático que ha manejado al Revolucionario Institucional en los últimos cuatro años y que lo ha llevado a cosechar una serie de derrotas en todas las elecciones.

Alejandro siempre será recordado por dos cosas: haberse reunido en lo oscurito junto con un grupo de consejeros con el entonces candidato del PRI a la gubernatura, Mario Marín Torres, encuentro que incluso fue videograbado y difundido por el portal de noticias  e-consulta.

Y también por haberse entregado, él junto con un selecto grupo de directores del órgano central, el famoso “bono de retiro”, documentado en su momento por este reportero, el cual fue ilegal y originó toda una controversia en el propio periódico Intolerancia, porque el director general de este diario, Enrique Núñez, reveló en ese entonces la fuente que me había entregado la documentación sobre los famosos bonos.

Imagínese usted, este es hoy el personaje que se perfila no sólo para integrar el sistema, sino que también se dice que para dirigirlo; en caso de ser así, se encargaría de vigilar, perseguir y sancionar a todos los funcionarios públicos que cometan actos ilícitos. “La Iglesia en manos de Lutero”. En fin.

Otro de los que se dice ha sido señalado por el dedo divino es el ex rector de la BUAP, José Doger Corte, con quien tengo una buena amistad, lo cual me puede hacer poco objetivo al hacer su análisis.

El ex rector es un hombre con claroscuros, su paso por la Universidad Autónoma de Puebla marcó el resurgir de esta institución a raíz del proyecto Minerva, el cual contó con todo el apoyo del ex gobernador Manuel Bartlett.

Su paso al frente del entonces Órgano Superior de Fiscalización, en tiempos de Melquiades Morales Flores, fue polémico, como siempre lo será para todo aquel que tenga que ver con el manejo de las cuentas públicas, sobre todo las de Mario Marín Torres.

En 2013, Pepe Doger fue candidato del PRI a la diputación local y contendió contra el ahora líder del Congreso local, el panista Jorge Aguilar Chedraui, quien lo derrotó en las urnas.

María del Carmen Leyva Báthory es una experta en el tema, su expediente al frente de la unidad de Transparencia del Ayuntamiento de Puebla, en las administraciones de Eduardo Rivera Pérez y Tony Gali, fue impecable colocando a Puebla capital en los primeros lugares de transparencia, lo cual le da todo el derecho de estar en el nuevo Sistema Anticorrupción.

El único “pero”, para quienes quieren encontrarlo, es precisamente el haber trabajado dentro de la administración del hoy gobernador de Puebla, lo cual de ninguna manera la inhabilita para ocupar adecuadamente una posición en el nuevo sistema.

Otro de los que se dice estaría señalado es el ex regidor y dueño de la Escuela de Leyes y Comunicación Angelópolis, Enrique Crispín Campos Ramírez, otro priista, quien en un tiempo fue muy cercano al ya fallecido empresario y ex presidente municipal de Puebla Rafael Cañedo Benítez.

También se habla de que el quinto elemento del sistema sería Paola Migoya Mastretta, egresada de la carrera de Comunicación por la Universidad de las Américas, heredera de dos de las sagradas familias de Puebla.

Este personaje se ha desempeñado en el ámbito de la administración pública municipal, en el trienio de Eduardo Rivera, como también el federal.

Su designación dentro de los 51 finalistas se le atribuye a la influencia de su tío, el empresario Jesús Migoya Junco, quien además preside el Consejo Ciudadano de Seguridad.

De confirmarse esta versión, la verdad es que el famoso Sistema Anticorrupción vaya que sí dejaría mucho que desear.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *