Millennials
Por: Estefanía Ruanova / @AnnRuanova
Buen inicio de semana mis queridos lectores, siempre y primero que nada agradezco a Dios por una nueva mañana, una nueva columna y que lleguen a nuestras vidas nuevas oportunidades para crecer.
“Lo quiero ya y lo quiero ahora”. Los millennials crecimos con la inmediatez, maduramos con la Internet y ahora podemos ver qué está pasando en cualquier lugar del mundo con las redes sociales. No estamos acostumbrados a esperar.
Esta semana les hablaré sobre un tema que nos caracteriza demasiado y es la poca paciencia que tenemos en nuestro día a día. ¿Por qué somos así? Simplemente queremos todo en el momento, no queremos esperar mucho tiempo para poder conseguir lo que buscamos, nos volvemos personas realmente nerviosas para conseguir las cosas, ya sea algún tema laboral, un gusto personal, alguna tecnología o más.
Nosotros queremos y estamos acostumbrados a obtener todo en 1, 2 por 3, sólo con tronar los dedos lo obtenemos y, ¿por qué no? si así es como crecimos. Crecimos en la etapa en donde el internet estaba ya dando algunos frutos, en donde obtener celulares sólo se debía caminar hacia un centro comercial y ver los beneficios que te ofrecían, conseguíamos los nuevos discos o películas de estreno en tiendas especiales en nuestra ciudad y ya no recurrir a un envío de paquetería desde Estados Unidos; la nueva tecnología, las novedades en el medio artístico y musical estaban ya a tan solo unos pasos de nosotros, no sufrimos esa espera que nuestros padres hablan, los conciertos incluso eran cada vez más frecuentes en Ciudad de México y en los estados cercanos a este.
Entrando el año 2000 todo lo antes mencionado se empezó hacer más fácil y rápido para todos nosotros, es por ello que con el crecimiento de la nueva era tecnológica, nosotros estábamos tomados de la mano con ella, así es como todos nosotros nos acostumbramos a obtener o conseguir las cosas; esos lapsos tan largos empezaron a disminuir, esas semanas de espera por conseguir el nuevo sencillo de nuestros artistas favoritos fueron disminuyendo, ya no tenemos que esperar meses para poder ver una película extranjera, ya que literalmente estamos a tan solo un clic de obtener esa película y toda la información que requerimos para poder realizar actividades, tareas, investigaciones o porque no, tan solo obtener un poco de diversión.
Recuerdo que mis padres y varios de mis tíos me han comentado por varios años que en su tiempo todo era mejor, que gozaban la espera de una carta, la entrega de un paquete desde otra ciudad y porque no ese momento sudoroso de ver una película que llegaba a México después de haberse estrenado hace 1 año al menos en otro país, pero nosotros somos personas instantáneas, nosotros no podríamos vivir con la zozobra de una respuesta de nuestra carta que fue enviada incluso hace algunas semanas, nosotros somos más digitales, somos tan instantáneos que ese nervio y sudor que nuestros padres compartieron no conseguimos asimilarlos incluso un minuto, la paquetería el día de hoy no tarda más de 15 días y porque no decirlo que las películas ahora son tan taquilleras que las casas productoras no se pueden dar el lujo de retrasar tanto las mismas.
La era de la tecnología llego con nosotros y es por ello que nosotros somos maquinas gigantes e imparables, por lo que la espera y paciencia no se encuentra ni en nuestro vocabulario, ni mucho menos en nuestro ADN.
Me despido, sin antes dejarles la frase de la semana que les ayudará a seguir adelante con sus sueños:
“Por el momento no estamos planeando conquistar el mundo.”
Sergey Brin, cofundador de Google.
