La red por la infancia trabajará a favor de los menores indígenas que se ven en la necesidad de abandonar sus comunidades
Ilse Contreras
La pobreza, desigualdad, migración de población indígena de algunos municipios del estado a la ciudad, así como el trabajo y trata de personas, son los principales problemas que enfrentan niñas, niños y jóvenes en la capital.
Así lo señaló la presidenta de la Red por la Infancia y la Adolescencia de Puebla AC, Jenny Hidalgo González, quien destacó que la falta de hogar lleva a las familias a buscar asilo en albergues, donde en ocasiones los menores son violados por adultos.
Sin embargo, el desconocimiento sobre dónde acudir para evidenciar estos casos trae como consecuencia la impunidad y falta de cultura de la denuncia
Desde 2005, la Red por la Infancia inició con 43 organizaciones que exigían al gobierno del estado implementar la Ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes que, aunque se aprobó, señaló, que fue deficiente, pues aún los derechos de los menores son violados.
Indicó que el próximo año trabajarán en la integración de investigaciones y registro de sus poblaciones sobre emigración indígena para hacer propuestas de acciones al gobierno estatal y que se elimine toda forma de violencia hacia los menores.
“No hay datos reales, el gobierno no tiene un censo, queremos saber cuál es la razón”, apuntó.
Hidalgo González refirió que su trabajo es volver a consolidar las organizaciones, pues actualmente la Red está integrada por 23, ya que la mayoría pertenecía a municipios de la Sierra Norte.
Dichas agrupaciones trabajan principalmente en temas sobre discapacidad, salud, educación, niñas, niños, adolescentes sin cuidados parentales y en situación indígena.
La presidenta indicó que la Red ofrece apoyo psicológico gratuito más que asesorar procedimientos legales, además de que otros organismos se encargan del monitoreo de medios para conocer la situación de agresiones a menores y jóvenes en Puebla.
La directora del Observatorio de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de Puebla (Odennap), que integra la Red por la Infancia, Elsa Herrera, resaltó que el organismo, junto con otras cuatro organizaciones, ha participado en procesos de consulta donde preguntan qué lugares de la ciudad les gustan, por qué, dónde tienen miedo y dónde se sienten felices, para con ello integrar un plan de incidencia con las voces de los menores.
“Es importante asumir que todos los entornos deben ser seguros para niños y niñas, desde las casas, escuelas, calles y transporte público, en ese sentido también les preocupa escuchar a niños y niñas”, dijo al indicar que han trabajado en colonias como San Manuel, La Libertad y La Loma.
