Arranca la caballada priista

Enrique Ochoa Reza, dirigente nacional del PRI, vino a tierra poblana para dar el banderazo de salida a la caballada del tricolor en busca de los diferentes cargos de elección popular que estarán en juego en 2018. El encuentro, más allá de lo que se esperaba, no resultó ni un regaño ni un ajuste de cuentas con los traicioneros y cizañosos del instituto sino un llamado a que no hay acuerdos cupulares para entregar la plaza el próximo año y que, para ganar en las urnas, el priismo poblano requiere más de un millón de sufragios, pues se espera una elección de tercios, en la que la alta competitividad será la tónica. ¿Será?

 

Dudas perredistas

Por si las dudas, el recién electo presidente del Comité Ejecutivo Estatal del PRD, Carlos Martínez Amador, acudió a ocupar las instalaciones acompañado de un grupo de simpatizantes, quienes tenían más cara de porros que de perredistas. La decisión la tomó luego de que el martes esperaba recibir oficialmente tanto el edificio como todas las cuentas y documentación necesaria, pero a la mera hora nomás no se concretó, lo cual lo puso bastante de malas. Así que para no errar, ayer decidió mejor ir acompañado. ¿Será?

 

Una necesaria respuesta

Más allá de culpar a la mafia del poder local o asegurar que le tienen miedo por su fortaleza política con miras a 2018, el diputado federal de Morena Alejandro Armenta Mier está obligado a dar una explicación pormenorizada del grave escándalo que lo persigue a razón de la adquisición a sobrecostos exorbitantes de inmuebles para la construcción de viviendas para los afectados por el huracán Dean en 2007. La red de terceros con quienes habría armado toda la trama que le permitió allegarse más de 80 millones de pesos ha quedado al descubierto y es necesaria una explicación. ¿Será?

 

Mensaje de conciliación

Para que no quedara duda de que el morenogalismo está de acuerdo en alcanzar algún acuerdo con el ex presidente municipal de Puebla Eduardo Rivera Pérez, el dirigente estatal de ese instituto, Jesús Giles Carmona, aseguró que “hay toda la voluntad de conciliar” no sólo con el ex alcalde inhabilitado sino con todos los sectores del partido con miras a 2018. Más claro ni el agua. Ahora sólo falta conocer la respuesta del cachorro consentido de la Organización Nacional del Yunque y si es lo suficientemente inteligente para leer el timing político que le ofrecen. ¿Será?

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