Las Serpientes
Por Ricardo Morales Sánchez / @riva_leo
Mientras por un lado aseguran que el Frente Ciudadano está más que listo y que el ex gobernador Rafael Moreno Valle ya amarró con Ricardo Anaya brindarle su apoyo a cambio de quedarse con Puebla, por otro afirman que el líder nacional del PAN habría pactado con Eduardo Rivera respaldarlo en sus intenciones de convertirse en el candidato del albiazul a Casa Puebla, así como darle el primer lugar en la Senaduría al diputado federal Juan Pablo Piña.
Este fin de semana habría trascendido que el ex mandatario de Puebla habría llegado a un acuerdo con el líder nacional del PAN, Ricardo Anaya Cortés, para aceptar la postulación del queretano a la Presidencia de la República por el Frente a cambio de quedarse con Puebla.
El supuesto acuerdo habría sido que Moreno Valle se quedaba con la candidatura a la gubernatura de Puebla para su esposa Martha Erika Alonso; además, la coordinación de los senadores de Acción Nacional en la próxima legislatura.
De hecho, se habla de que sólo sería cuestión de ponerse de acuerdo con las diferentes tribus del PRD para que el próximo 14 de este mes quede registrado el Frente Ciudadano, integrado por el PAN, el partido del Sol Azteca y Movimiento Ciudadano, de Dante Delgado.
Al menos esta es una versión que se difundió durante el fin de semana.
Pero también existe otra que señala que hace unos días el dirigente nacional del PAN, Ricardo Anaya Cortés, se habría reunido con Eduardo Rivera Pérez, Humberto Aguilar Coronado y el diputado federal Juan Pablo Piña Kurczyn.
Según cuentan, Anaya se habría reunido con Rivera para amarrar su postulación como abanderado para 2018. En una primera instancia le habría ofrecido la candidatura del PAN a la presidencia municipal de Puebla, la cual habría sido rechazada por el ex edil capitalino.
Rivera le habría confiado a Anaya que de aceptar, su situación sería igual a la que vivió en 2011, cuando estuvo al frente de los destinos de la ciudad de los ángeles, es decir, de estar completamente acotado en su margen de maniobra.
Ante este escenario, se dice que Anaya habría ofrecido entonces la candidatura del PAN a la gubernatura para Rivera, en caso de que no hubiera un acuerdo con el ex mandatario Rafael Moreno Valle.
De la misma forma, Anaya le habría asegurado al diputado federal Juan Pablo Piña que sería él quien encabezaría la fórmula del albiazul al Senado de la República.
Y es que son varias las ecuaciones que se pueden dar de aquí a que se den las definiciones reales rumbo al proceso electoral de 2018.
¿Con quién jugarán de manera real Rafael Moreno Valle y Tony Gali en Puebla? ¿Con su amigo el priista José Antonio Meade o con Ricardo Anaya y el Frente?
Realmente la decisión sobre en quién recaerá la candidatura del PAN a la gubernatura se ha convertido en un verdadero acertijo.
Lo único que al parecer queda claro es que si hay bloque, las posibilidades de que Martha Erika Alonso sea la candidata a la gubernatura crecen, mientras que si no hay, entonces el fantasma de la designación podría beneficiar al ex presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, pero con pocas posibilidades de triunfo debido a que no cuenta con la estructura suficiente, ni con el apoyo del grupo en el poder.
La ruptura al interior del PAN beneficiaría al PRI, el cual tendría dos opciones: el candidato mejor posicionado, el actual delegado del IMSS Enrique Doger Guerrero, quien en múltiples ocasiones ha acordado con el morenogalismo o el amigo del abanderado tricolor a la Presidencia de la República, Jorge Estefan Chidiac.
Con cualquiera de los dos, el morenogalismo tiene forma de tender puentes, aunque con Doger son mejores y también los números parecen favorecer al académico sobre el actual líder estatal del PRI.
Esta semana, sin lugar a dudas, será vital para conocer del desenlace sobre el Frente, mismo que es clave para dilucidar, finalmente, qué sucederá en Puebla y si finalmente Moreno Valle logró negociar con Ricardo Anaya para ir juntos en la elección de 2018 o si finalmente la ruptura azul le puede beneficiar al PRI o si Morena se queda con el camino libre rumbo a Los Pinos y a Casa Puebla.
