Traspatio
Por: Luis Pavón / @pavonlui
En estados como Baja California Sur, Colima, Zacatecas, Guanajuato, Querétaro, Aguascalientes y Tabasco los índices de violencia subieron y las autoridades minimizan la situación.
A José Antonio Díez Alarcón. Ex alumno UPAEP, víctima de la violencia sin fin.
Diecisiete estados del país, es decir, más de la mitad están en focos rojos, por los delitos de alto impacto.
153 mil 329 denuncias se presentaron de enero a noviembre del año pasado, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). Aún no presentan la cifra de diciembre.
2017 fue el año más violento en la historia de México y en 2018 no se ve que la situación mejore. Sin embargo, estamos en un periodo en el cual escucharemos promesas y más promesas de que ellos (los candidatos) sí saben cómo acabar con la violencia. Lo mismo de siempre.

En algunos de los estados con los índices más altos de inseguridad habrá elecciones a gobernador: Veracruz, Tabasco y Puebla, por mencionar algunos.
Pero la radiografía de las entidades más violentas en 2017 es preocupante. El Observatorio Nacional Ciudadano para la Seguridad y Legalidad señala que entidades que solían ser seguras se colocaron en los primeros cinco lugares de homicidio, secuestro, extorsión y robo, por cada 100 mil habitantes.

Se disputan el primer lugar Baja California Sur, Colima, Zacatecas, Guanajuato, Querétaro, Aguascalientes y Tabasco.
En todos esos estados, las autoridades minimizan la situación. Mencionan que sí tienen un problema de inseguridad, pero no es para alarmarse, que no es algo exclusivo de la demarcación.
Para el fiscal de Tabasco, Fernando Valenzuela, la entidad enfrenta un fenómeno delictivo que no padecían y que les alteró su forma de vida, pero la situación no es tan grave.
“No tenemos las cifras ni nos agrada compararnos, ni tampoco las condiciones de peligro de otros estados en el norte o del bajío”, expresó durante una entrevista que le hice en octubre del año pasado.
De enero a noviembre de 2017, en Tabasco fueron denunciados 72 secuestros, cifra que ya había superado el número de casos de todo 2016. Y estas sólo son las carpetas de investigación en la Fiscalía del Estado, faltan las presentadas ante la PGR.
El robo con violencia a negocio y ganado colocaron a Tabasco en el primer lugar nacional, según la directora del Observatorio Ciudadano de la entidad, Julia Arrivillaga.
La inseguridad que vive el estado obligó a muchos de sus pobladores a instalar cámaras de circuito cerrado, alarmas y cercos eléctricos en sus casas.
El robo con violencia se cuantificó en nueve mil 811 denuncias de enero a noviembre, cifra muy por encima a la de 2016.
La encuesta nacional sobre seguridad pública realizada por el INEGI ubicó a Villahermosa como la ciudad con mayor percepción de inseguridad
En el caso de Colima, estado con una población de 720 mil habitantes, era una demarcación que se decía tranquila. Desde 2016 ocupa el primer lugar nacional en homicidios, por cada 100 mil habitantes.
De igual manera, en ese año se registraron 524 asesinatos intencionales, cifra superada en los primeros 11 meses del año pasado, con 623 casos.
En el delito de secuestro, el primer lugar lo ocupó Zacatecas.
Los casos denunciados de enero a noviembre de 2017 sumaron 64, casi el doble de los registrados en 2016 que se cuantificaron en 37.

Homicidios, huachicol y robo con violencia colocaron a Guanajuato en los tres primeros lugares a nivel nacional en delitos de alto impacto, según el Observatorio Nacional Ciudadano.
Mil cuatro asesinatos dolosos se cometieron de enero a noviembre de 2017, mientras que en el mismo periodo de 2016 se registraron 797.
El robo con violencia pasó de seis mil 934 denuncias en los primeros 10 meses de 2016 a nueve mil 190 el año pasado.
Empresarios locales y autoridades atribuyen la violencia que registra Guanajuato a la colindancia que tiene con Michoacán y Jalisco, estados con amplia presencia del crimen organizado.
“Estas personas que han perdido la vida, muchos de ellos tuvieron bastantes detenciones: entre 70 y 80 veces por cuestiones de aseguramiento de droga o de armas las veces anteriores”, fue la visión de Luis Enrique Ramírez Saldaña, secretario de Seguridad Pública de León, Guanajuato.
Querétaro, entidad que no figuraba en los estados con altos índices delictivos, se posicionó en segundo lugar nacional en robo de vehículo; cuarto lugar en robo a negocio y violación, de acuerdo con el informe de octubre 2017 del Observatorio Nacional Ciudadano.
Aguascalientes se ubicó en cuarto lugar nacional en robo con violencia a casa habitación y transeúnte. Los primeros 11 meses de 2017 sumaron mil 31 denuncias, cifra que superó a las 882 registradas en 2016.
“El tema preocupante es el de los homicidios”, es lo que consideró en noviembre de 2017 Erasmo Palemón Alamilla, procurador de justicia de Baja California Sur.
A propósito de la entidad, ésta registra una ola de violencia sin precedentes.
La tasa de homicidios, extorsiones y robo ubicaron a esa demarcación en los tres primeros lugares a nivel nacional, por cada 100 mil habitantes, según las cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Octubre de 2017 sumó 98 homicidios dolosos, cifra récord en esa entidad, ya que en el mismo periodo de 2016 sólo se registraron 24.
Asimismo, empezaron a darse las desapariciones de personas, el cobro de piso y fueron dejados cuerpos colgados en zonas muy transitadas de esa entidad.
“Todos tenemos miedo a lo que está sucediendo aquí en Cabo San Lucas, San José del Cabo, La Paz. Es un pánico que tenemos y no sabemos quién nos va a ayudar”, me narró Karina, hermana de una persona que desapareció en octubre del año pasado.
En Puebla, el robo de combustible también puso a la entidad en focos rojos.
2018 está en curso. El inicio del año fue bastante violento, no se ve que las cosas vayan a cambiar, las autoridades siguen en lo mismo, así que nunca está mejor dicho: ¿Quién podrá defendernos?
