Al saqueo a trenes y a la perforación de ductos de Pemex para obtener gasolina se ha sumado una nueva modalidad de robo, incluso más peligrosa que sortear los cultivos en busca de huachicol.
Por: Ilse Contreras
Las bandas delictivas han optado por extraer de forma ilícita gas LP, confirmó el comandante de la XXV Zona Militar, Raúl Gámez Segovia, al reportar que a la fecha se han detectado dos tomas clandestinas.
Precisó que estos ductos fueron detectados en San Martín Texmelucan y Xoxtla, mismos que fueron clausurados de inmediato junto con personal de Petróleos Mexicanos (Pemex).
En ese sentido, hizo un llamado a la ciudadanía a seguir denunciando, pues –dijo--es una actividad que implica un mayor riesgo para la zona conurbada.
“Existe un mayor riesgo, la ciudadanía debe entender que el robo a gas es más explosivo y es mayor riesgo”, dijo previo al festejo del Día del Ejército.
En cuanto al robo de trenes, Raúl Gámez indicó que en los últimos siete meses han registrado cuatro casos y en lo que va del año, solamente uno.
Pese a que ha habido “muchos intentos” de robo a locomotoras, la presencia de elementos estatales, ejército y seguridad privada de Ferrocarril del Sureste (Ferrosur) en la zona del triángulo rojo lo han impedido, aseguró.
Ante el incremento de los reportes de saqueo a vagones, registrados en 2017—con 138 eventos de enero a septiembre--, las autoridades poblanas habrían atribuido dicho crecimiento al combate de las bandas de “huachicoleros”.
No obstante, esta no sería la única actividad con la que se ha diversificado el robo de combustible en la entidad.
Desde el año pasado se ha mencionado que los huachicoleros han cambiado de giro y se mencionaba la presencia de organizaciones que operaban en la región de Tepeaca para el robo de gas LP.
Además, en octubre de 2017, un grupo de piperos denunció el robo de 200 unidades, las cuales sospechaban eran utilizadas para el trasiego de huachicol.
En 2016 ya habían señalado que los delincuentes hacían pedidos de agua en colonias alejadas, donde amagaban al conductor y hurtaban la unidad.
En enero, la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), detectó una relación entre el aumento en el robo de hidrocarburo con el de vehículos pesados como tractocamiones, camionetas y semirremolques en los límites con Tlaxcala y Veracruz.
Inclusive, la incidencia detectada en la entidad de 225% por la asociación, coincidió con dichos estados que también padecen el robo de combustible, las cuales han formado un triángulo carretero peligroso para el transporte mercantil.
A esto se agrega el aumento del robo en unidades del transporte público en la capital, pues en su momento, las autoridades estatales también atribuyeron esto al cambio de actividades de huachicoleros ante el combate al robo de combustible.
