Encrucijada
Por: Luis Antonio Godina / [email protected]
México evoluciona de manera cotidiana, fortalece sus procesos, sus instituciones y su democracia.
Hoy, los ciudadanos estamos atentos al desarrollo de las campañas electorales y de lo que los partidos y candidatos plantean.
Por ello, será importante ver lo que ocurra en los debates entre los candidatos presidenciales que tendrán lugar el 22 de abril en la Ciudad de México con los temas: política y gobierno; el 20 de mayo en Tijuana con el tema: México en el mundo; en Mérida el 12 de junio con el tema: Economía y desarrollo.
Será, sin duda, un ejercicio que nos dará luz a los ciudadanos sobre las ofertas de campaña y sobre lo que cada uno propone para el país.
También será, sin duda, un ejercicio democrático para que los electores sepamos el México que los candidatos quieren.
Eso nos hace preguntarnos: ¿Por qué debemos esperar hasta abril?
Es cierto que las normas nos señalan que debe existir este periodo de intercampañas, pero ahora sería una estupenda oportunidad para saber qué piensan los candidatos.
Es importante saber cómo uno de los presidenciales quiere llevar a México al siguiente nivel, saber qué indicadores mejorarían, qué programas se llevarían a cabo y qué políticas públicas tendrían prioridad.
O conocer las razones por las que otro de los candidatos se opone a las reformas estructurales aprobadas, o al nuevo aeropuerto, o a perseguir a dirigentes sindicales señalados de malos manejos.
O escuchar a otro de los candidatos explicar sus propuestas económicas para entregar a los mexicanos dinero por el simple hecho de ser mexicanos.
Necesitamos saber qué piensan de temas polémicos, cómo combatir la corrupción y de qué manera abatir la pobreza.
Los ejercicios de debate entre los coordinadores de campaña permiten a los ciudadanos acercarse a las propuestas de campaña y, sobre todo, es un ejercicio democrático.
La política es debate, confrontación de ideas, contraste de propuestas y, sobre todo, negociación y acuerdo.
Eso necesitamos, contrastar propuestas, ideas y en medio de todas, encontrar la que a cada uno de nosotros nos convenza.
Por eso necesitamos más debates, más contraste de propuestas, más ideas, y no menos.
Por eso pregunto: ¿Por qué esperar hasta abril?, deberíamos ver los debates hoy.