La Quinta Columna 
Por: Mario Alberto Mejía / @QuintaMam

El caso Layda Sansores está sacando lo peor de MORENA.

Bastó que Denise Maerker diera a conocer en su noticiero que la candidata  que busca ser alcaldesa de Álvaro Obregón gastó 700 mil pesos del Senado de la República en cosas personales para que personajes como John Ackerman y su mujer —Irma Eréndira Sandoval—salieran a defender a la hija del Negro Sansores: uno de los priistas más oscuros del pasado que está volviendo a través del partido de López Obrador.

El propio AMLO, faltaba más, defendió a Layda Sansores con su tradicional sonsonete de la guerra sucia y de la Mafia del Poder.

Lo curioso es que quien será la secretaria de la Función Pública —es decir: la contralora de la Cuarta República— se solidarizó con Layda Sansores y descalificó el pulcro reportaje de Fátima Monterrosas.

Carlos Loret de Mola sugirió en su columna de El Universal que la esposa de Ackerman —un furioso comisario stalinista— tendría que renunciar al virtual Gabinete de AMLO, una vez que está impedida moralmente de ser la contralora que el país necesita.

Y es que quien exonera sin investigar no merece estar al frente de la Función Pública.

Sería, faltaba menos, un despropósito.

Iría contra las reglas no escritas de la Cuarta República y nos regresaría, de súbito, a la Mafia del Poder de la que vienen huyendo los AMLO, los Bartlett, las Laydas, los Napitos y los José Juanes (para hablar de un aldeano).

Mal empezaría nuestra revolución del proletariado sin cabeza con una contralora tan parcial.

Lo cierto es que los chairos, los Peje Zombies y demás fauna han salido en defensa de la senadora Miss Clairol, quien se dice víctima de la horrorosa Mafia del Poder.

 

El Burro que Quiere Volver a Tocar la Flauta

José Juan Espinosa en vivo es más divertido que el Caballo Rojas o Lalo el Mimo.

Vea el hipócrita lector:

El candidato de MORENA por el distrito local 20 acudió a dar una rueda de prensa a las instalaciones de Audi, en San José Chiapa.

Ahí pidió que se investigue la llegada de la armadora alemana a Puebla, una vez que el presidente de esa poderosa empresa había sido detenido en Alemania por el asunto del Dieselgate.

Ignorante como es el ex alcalde de San Pedro Cholula (primo hermano de Brutus), confundió el caso de la manipulación de emisiones detectada en vehículos de Volkswagen con un supuesto conflicto relacionado con la puesta en marcha de una planta.

Sólo faltó que pidiera la intervención de la ONU y de la Interpol.

En su alegato, sin que tampoco viniera al caso, José Juan habló del affaire “Orderbrec” (quiso decir Odebrecht) y del “detrimiento” de la economía.

No son novedosas sus pifias.

Lo grave es que así quiere volver a ser diputado local.

Queda claro que Dios ama a los tontos.

 

Lastiri en los Tribunales

Luego de trabajar durante muchos años al lado de Juan Carlos Lastiri, Carlos Castillo fue tratado con la punta del pie por el candidato del PRI al Senado de la República.

Se avizora un severo conflicto laboral, pues Carlos, ex jefe de prensa de Lastiri, sólo recibió malos tratos y peores pagos en la última etapa de su relación.

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