Las Serpientes
Por: Ricardo Morales Sánchez / @riva_leo
Como ya lo habíamos mencionado, el candidato por la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador, luce inalcanzable y es ya, virtualmente, el nuevo presidente de México.
La lucha ahora se centra por el Congreso, Cámara de Diputados y de Senadores, así como por las gubernaturas que están en juego en un proceso electoral federal que luce definido en cuanto a la presidencia de la República, por más que algunos busquen aferrarse a lo contrario.
El periódico español El País apuntó el pasado fin de semana que si hoy fueran las
elecciones, Andrés Manuel López Obrador afronta el último mes antes de las elecciones con una sustancial ventaja sobre sus rivales. De acuerdo con este diario, el más influyente en la lengua hispana, el candidato por Morena cuenta con 48% de intención de voto, según el promedio de sondeos y ha aumentado su ventaja hasta 20 puntos con respecto a Ricardo Anaya, que cuenta con 28%. El abanderado por el PRI, José Antonio Meade, sigue tercero, con 20%, consigna este periódico.
De acuerdo con el modelo electoral deEl País, López Obrador tiene 92% de probabilidades para ser electo presidente el próximo 1 de julio; el candidato de Por México al Frente, 9% y Meade, 1%, es decir, sólo se impondría una de cada 100 veces.
Ahora lo interesante será ver cómo queda integrado el Congreso y quién gana las elecciones en las nueve entidades que también tienen que renovar al titular del Ejecutivo.
Grupo Impacto presentó también un estudio sobre cómo quedaría integrado el Congreso ante el posible triunfo de Andrés Manuel, quien de acuerdo con esta empresa, tendría 45% de las preferencias, lo que desde mi muy particular punto de vista se acercará mucho al resultado final del cómputo electoral.
Anaya aparece en segundo lugar con 21% y con 16% se quedarían el PRI y su abanderado, José Antonio Meade Kuribreña.
De acuerdo con esta empresa, el tabasqueño ganaría en 25 estados de la República, el queretano Anaya sólo en cuatro y Meade nada más en uno, mientras que dos entidades estarían competidas entre El Peje y Anaya. Donde ganaría Anaya sería en Aguascalientes,
San Luis Potosí, Nuevo León y Durango; en tanto, Meade en Coahuila, el estado más priista del país; López Obrador y el queretano se disputan Guanajuato y Yucatán.

López Obrador tiene su fortaleza en la tercera y cuarta circunscripción federal, donde de
acuerdo con Grupo Impacto, registra preferencias electorales de 56 y 54%, las más amplias en todo el país.
En la primera circunscripción tiene una preferencia electoral de 41%, en la segunda de
32%, su más baja, pero aun así le alcanza para superar a Anaya y a Meade; finalmente, en
la quinta tiene una preferencia de 44% para un promedio de 45%.
Y ahora viene lo interesante, porque es claro que habrá un voto diferenciado en esta
elección, ya que mientras López Obrador trae una intención de voto de 45%, sus candidatos a diputados federales por la coalición Juntos Haremos Historia se caen 10% y obtienen en paquete 35%.
Morena sumaría 32%, el PT 2% y el PES sólo 1%. Aun así, serían la bancada mayoritaria,
seguida por la coalición Por México al Frente con 25%, el PAN 19%, el PRD 4% y MC
con 2%. El PRI, con 17%.


En cuanto al Senado de la República, las cosas serían muy similares: 35% para Morena y
sus aliados; el PAN y sus coaligados 23%, dos puntos menos que en la contienda por las
diputaciones; y el PRI con el mismo 17%, lo que se limita a su voto duro.
Así las cosas en la lucha por la presidencia de la República, el Senado y las diputaciones
federales, a unos cuantos días de que termine la campaña, tomando en cuenta que el 14 de este mes arranca el mundial de Rusia 2018.

NADIA NAVARRO, UNA AGRADABLE SORPRESA
La que tiene sorprendidos a todos en la clase política es Nadia Navarro por su destacada
participación en el debate entre senadores.
Pocos se esperaban que esta candidata tuviera tan buen desempeño. Y es que la abanderada por la coalición Por México al Frente es una mujer de trabajo y no es muy mediática, pero sin duda es una dama con tablas, inteligente y que dará mucho de qué hablar cuando llegue al Senado.
Por lo pronto, sus adversarios aún no se recuperan de los golpes que les propinó en el
debate. Y es el tema principal en las sobremesas políticas.
