Por: Notimex
Foto: Archivo
El Gran Telescopio Milimétrico (GTM) “Alfonso Serrano”, que se encuentra en la cima del Volcán Sierra Negra, estado de Puebla, fruto de la colaboración México-Estados Unidos, es el telescopio movible más grande del mundo.
Este instrumento científico se dedica al estudio del origen del universo y su evolución en el tiempo, a través de la formación de cometas, planetas, estrellas, galaxias y agujeros negros.
Aunque por sus instalaciones y condiciones extremas climáticas que requiere (temperaturas que pueden alcanzar hasta menos siete grados centígrados) es la inspiración y principal locación de la película de ciencia ficción y suspenso "Cygnus", dirigida por Hugo Félix Mercado, la cual se estrenará en salas de cine el próximo viernes 2 de noviembre.

Detrás de este instrumento científico, está el esfuerzo del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) y la Universidad de Massachusetts.
Su construcción llevó dos décadas, está ubicado a cuatro mil 640 metros de altitud, el GTM tuvo un costo de 200 millones de dólares.
Por su dimensión, llegar a este “gran platillo” toma dos horas en vehículo y, debido a la baja presión, las personas deben detenerse cada 10 minutos para no sufrir el llamado "mal de montaña”, es decir, náuseas, fatiga, pulso rápido y dificultades respiratorias, pues se reduce hasta 20% la saturación de oxígeno en la sangre.

Para su operación, el Gran Telescopio Milimétrico requiere de al menos dos personas para su control, y desde su espacio permite a los científicos captar la radiación milimétrica, objetos lejanos en frecuencias o bandas diferentes, así como los objetos más fríos del universo, con temperaturas cercanas al cero absoluto.
