Plumas Ibero
Por: Mercedes Núñez Cuétara
Los posgrados y la maestría en hábitat y equidad socio territorial de la Ibero enseñan a generar respuestas a los problemas que aquejan.
Cada vez es más frecuente escuchar noticias sobre inundaciones, escasez de agua, hacinamiento, contaminación urbana, incendios forestales, huracanes, etcétera. No hay un solo día que no encuentre en los medios una nota similar. Un ejemplo nacional de ello es el megacorte de agua en Ciudad de México por el mantenimiento del Sistema Hidráulico Cutzamala, que dejó por cinco días a la mitad de los habitantes sin agua. Para comprender la magnitud de este hecho es importante recordar que en Ciudad de México viven más de 20 millones de personas y que paradójicamente es una ciudad que presenta problemas graves de inundaciones ¿dónde está nuestra capacidad para la captación y gestión del agua?
A nivel mundial, hemos sido testigos de los incendios forestales que están afectando el estado de California, en Estados Unidos y que, de acuerdo con información de CNN Noticias, ha cobrado la vida de al menos 44 personas; la pérdida material de seis mil 453 viviendas y la extinción de la naturaleza que habitaba en los tres mil 237 kilómetros cuadrados de tierra consumida por el fuego ¿cómo influye la explotación de los recursos naturales en estos eventos?
Los anteriores son sólo dos ejemplos recientes que ponen en evidencia las catástrofes que enfrentamos hoy en día y que son consecuencia del inadecuado uso y gestión que los humanos hemos hecho de los recursos naturales. Ahora nos corresponde idear estrategias sociales de diseño urbano, conservación de la naturaleza, entre otras, para mitigar los efectos generados.
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) emitió un informe en octubre de 2018 sobre los impactos del calentamiento global. En él advierte que entre 2030 y 2052 la temperatura en la tierra aumentará al menos 1.5°C. Los impactos de este incremento atentan contra la existencia de muchas especies. El informe menciona que es necesario tomar acciones inmediatamente que modifiquen la forma de generar energía, gestionar residuos industriales, la construcción de viviendas y los medios de transporte.
Ante esta realidad, la Universidad Iberoamericana Puebla creó en 2016 la maestría en Hábitat y Equidad Socio Territorial que tiene como objetivo formar estudiosos de los asentamientos humanos y del territorio que éstos habitan. La característica que distingue a este posgrado es que aborda al territorio más allá de su potencial de desarrollo urbano o de motor económico y se centra en comprender las dimensiones sociales y medioambientales implicadas en dichos territorios para proponer alternativas frente a los retos y desafíos actuales como lo es el cambio climático y la exclusión socio territorial. Los trabajos de investigación desarrollados en la maestría se orientan a enfrentar problemáticas complejas como la provisión del agua, la calidad de vivienda, los esquemas de movilidad, la prevención y atención de riesgos, entre otros.
La maestría en Hábitat y Equidad Socio Territorial cumple dos años y con el segundo aniversario llega la titulación de las primeras egresadas. El 5 de octubre se llevó a cabo el examen profesional de Sandra Varela, quien se convirtió en la primera estudiante titulada, con una tesis que propone una estrategia de rescate territorial en una calle de la ciudad de Puebla. Paulina Díaz se tituló el 9 de octubre al presentar su proyecto de investigación en el que analiza la funcionalidad de un espacio público mediante un enfoque multifactorial y genera propuestas para mejorar los procesos de diseño, implementación y gestión de dicho espacio.
Los posgrados, como la maestría en Hábitat y Equidad Socio Territorial, generan en el estudiantado un valor agregado, ya que además de los conocimientos técnicos adquiridos, les enseña a mirar, comprender y generar respuestas para los problemas que nos aquejan como humanidad y que imposibilitan la generación de vida digna.

