Garganta Profunda
Por: Arturo Luna Silva / @ALunaSilva
Como si el horno estuviera para bollos, Claudia Rivera Vivanco se dispone a realizar un nuevo viaje internacional. Esta vez el destino es la República Popular China, en el otro lado del mundo, literalmente. En sus horas más bajas desde que asumió el cargo en octubre del año pasado, la presidenta municipal tiene las maletas listas para asistir a un evento que, viendo cómo están las cosas en la ciudad de Puebla, podría ser totalmente prescindible: el Foro de Alcaldes 2019, organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Fue el 21 de enero cuando Claudia Rivera recibió la carta invitación de Tatiana Gallego-Lizón, jefe de División de Vivienda y Desarrollo Urbano del BID, para acudir al país asiático del lunes 25 de marzo al jueves 28 de marzo, en un periplo que implica, entre otras actividades, una visita de campo a una reserva de pandas, el tierno y simpático animal que simboliza la cultura y tradición chinas.
Hasta donde se sabe, el viaje ha sido hasta hoy todo un misterio para los integrantes del gabinete municipal, pero sobre todo para los regidores del Cabildo capitalino, quienes deben aprobarlo, pero a la fecha ni siquiera por elemental cortesía han sido notificados de la nueva aventura de la alcaldesa.
No se trata de un problema de financiamiento, pues el BID le proporcionará la cantidad de seis mil 700 dólares estadunidenses para cubrir sus gastos de traslado (tarifa ejecutiva), subsidio y seguros; el conflicto, en todo caso, está en si es oportuno –y más que eso, si es necesario– ese viaje hasta China, ante todos los pendientes y los problemas de un gobierno municipal que sigue sumido en el desorden, la inexperiencia, las divisiones y guerras internas, y hasta la ambición desmedida y soberbia de muchos de sus integrantes.
En septiembre de 2018, antes de tomar posesión como presidenta municipal, en el largo periodo de transición, Claudia Rivera y su séquito causaron polémica por un viaje a Washington, DC, con una rápida escapada a New York, como parte de la comitiva encabeza por su hoy antecesor, el ex edil Luis Banck Serrato.
La polémica devino en escándalo mayúsculo el mes de febrero, cuando, en medio de verdades a medias y mentiras completas, decidió trasladarse a Viena argumentando que asistiría al XV Congreso Mundial de la Organización de las Ciudades Patrimonio Mundial, un evento que sin embargo será hasta junio próximo y en Polonia, no en Austria.
Los días en Viena fueron muy felices para la presidenta municipal, no así para los ciudadanos, pues su ausencia coincidió con un notable repunte en los hechos delictivos en una ciudad lamentablemente presa de la violencia ante la indolencia, e incapacidad, de la autoridad.
Claudia Rivera regresó de Viena en medio de fuertes críticas prácticamente por parte de todos los sectores y ya se disponía a emprender un nuevo viaje, esta vez a París, Francia, so pretexto de su participación en el foro denominado “Women4Climate”.
Sin embargo, se vio obligada a suspenderlo para tratar de acallar, en lo posible, las voces que, desde entonces, siguen sin dar crédito a lo sucedido en torno, y en el entorno, de la alcaldesa de Morena, muy por debajo de las expectativas generadas en campaña, por más que se ufane en decir que cuenta con el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador, con quien el pasado fin de semana se sacó una fotografía profusamente difundida por su aparato de propaganda.
El traslado a China está confirmado y en proceso.
La salida de la presidenta municipal hacia el país más poblado del mundo está prevista para el domingo 24 de marzo, pues se trata de un vuelo de casi 18 horas o más; regresará, se espera, el sábado 30 de marzo, y se desconoce si acudirá sola, o acompañada, como ocurrió en Nueva York y especialmente en Viena.
Suficientes días para, además, seguir pensando en la reelección, una meta que ya está convertida en verdadera obsesión por más que, desde su propio partido, se le estén enviando numerosas señales de que ni lo piense, aunque ese, ese es otro tema.
A Asia, pues, el nuevo viaje de Claudia Rivera.
Mientras tanto, la seguridad, el problema de los ambulantes, los servicios públicos, la movilidad, la pavimentación de calles, el mantenimiento del Centro Histórico y el largo, largo etcétera de pendientes… pueden seguir esperando.