La mayoría de historiadores concuerdan en que la fundación de Puebla, tuvo un propósito dual, un objeto “logístico comercial” por su ubicación en la zona golfo centro de la Nueva España y sentar la bases de una “utopía social” en aras del desarrollo humano y espiritual de sus habitantes.

Hasta antes del año 1519, el área que ocupa hoy Puebla se conocía como Cuetlaxcoapan, en náhuatl significa: “lugar donde las serpientes vienen a cambiar de piel”, básicamente era un terreno neutral en la sociedad mesoamericana, destinado a las guerras floridas.

En el libro Hugo Leicht no solo escribió Las calles de Puebla: documentos que representan otra faceta del investigador alemán, escrito por Rodolfo Pacheco Pulido y editado por el Consejo de la Crónica del Municipio de Puebla en 2004, se dirime la responsabilidad fundacional de Fray Julián de Garcés, Fray Toribio de Benavente y del licenciado Juan de Salmerón, en el ensayo hipotético se afirma que, De Salmerón en su calidad de “oidor” mandó una misiva firmada en marzo del 1531 a la Real Audiencia de México solicitando, “…la invención de ella (de la traza de Puebla de los Ángeles) no tiene más fundamento que el de mi pobre juicio…”; fue hasta el 30 de marzo de 1532 cuando la reina gobernadora Isabel de Portugal esposa del emperador Carlos V Rey de España, otorga la Cedula Real que le da el título de “Ciudad de los Ángeles”.

PLANIFICACIÓN COMO CLAVE

El éxito urbanístico de la entonces recién fundada “Ciudad de los Ángeles”, se debió a la planificación del uso de suelo y prerrogativas urbanas, en la “joya documental” existente en el archivo histórico de Puebla, se pueden apreciar los siguientes ordenamientos:

  •  Dotación de tierras para sembrar
  •  Delimitación de la traza urbana y
  •  Repartimiento de las casas habitación de la mano de obra para la producción

PRIMERAS VECES EN EL URBANISMO DE LA NUEVA ESPAÑA

La planificación implementada permitió que se establecieran medidas exitosas de urbanismo, algunas de ellas únicas en la geografía política de la Nueva España.

Resguardo de peatones del sol.

La traza original iniciada en el año 1530 con sentido noreste, permite la orientación de las calles del Centro Histórico, resguardando las banquetas de los rayos directos del sol, permitiendo que los angelopolitanos caminemos a la sombra.

Calles a prueba de inundaciones. 

El diseño de tipo reticular inició durante los años 1534 al 1536, en época de lluvias, las calles no se inundaban, ya que la inclinación de su construcción hacía correr el agua pluvial al río San Francisco, hoy bulevar 5 de Mayo.

La primera banqueta conceptualizada.

Construida  en  el año 1542 en el frente del Templo de Santo Domingo que alberga la Capilla del Rosario, ubicado en la peatonal 5 de Mayo y 4 Poniente, hecha con piedra bola traída del río San Francisco; pasaron más de 300 años para cubrir solo 30% de todas las banquetas en la ciudad.

JUAN DE PALAFOX Y MENDOZA (1600 – 1659), ¿EL PRIMER ESPECIALISTA EN MOVILIDAD DE PUEBLA?

Casi 100 años después del periodo fundacional de Puebla, y con menos de nueve años de estadía entre los años 1640 y 1649, el Obispo y breve Virrey de México (durante seis meses en el año 1642), impulsó la modernización de Puebla, ordenando la construcción de edificios, hospitales públicos y colegios como el de San Pablo que dio origen a la Biblioteca Palafoxiana; su obra cumbre en estas tierras fue terminar la Catedral, que consagró el 18 de abril de 1649, sus restos descansan en su amada Raquel.