Sin Derecho de Réplica
Por: Alberto Rueda / @AlbertoRuedaE

Las campañas políticas han concluido y prácticamente la decisión sobre quién culminará el gobierno de Martha Erika Alonso está tomada.

Las últimas mediciones así lo reflejan, dando como virtual ganador de la contienda a Luis Miguel Barbosa.

Y no es para menos. Se trata del único candidato que tenía la experiencia de hacer campaña un año atrás, con estructura y un equipo bien estructurado.

Las campañas políticas son una batalla de convencimiento, por lo que se requieren estrategas que propongan las mejores ideas para hacerse del triunfo.

Para que una campaña proselitista sea exitosa es necesario tener los mejores colaboradores que son, por lo general, los que junto al candidato toman las decisiones más importantes y se convierten en su primer círculo.

En el caso de Luis Miguel Barbosa contó con David Méndez, su coordinador de campaña y vocero en dos ocasiones. Un hombre de todas las confianzas del candidato que supo jugar un papel de bajo perfil y fue operador fiel del proyecto barbosista.

Otros hombres del primer círculo del candidato fueron Gabriel Biestro, Mario Bracamonte y Carlos Figueroa.

En el área de comunicación social, Verónica Vélez Macuil fue una pieza clave para la difusión de las propuestas y actos de campaña de Luis Miguel Barbosa.

En el caso de Enrique Cárdenas, su hombre de confianza ‒al menos en la primera mitad de la campaña‒ fue Gabriel Hinojosa, ex presidente municipal y quien, junto al candidato, conformaron el movimiento de la sociedad civil Sumamos.

Con el paso de las semanas se integraron a este grupo los panistas Genoveva Huerta, Luis Olmos y Francisco Fraile. Hubo ausencia de personajes ligados a Movimiento Ciudadano y al PRD que se incluyeran en su equipo de confianza.

El área de comunicación social estuvo a cargo de Jorge Machuca quien desarrolló un papel regular para la difusión de las actividades de Enrique Cárdenas.

Finalmente, Alberto Jiménez Merino se rodeó de personajes como Valentín Meneses en la coordinación de la campaña; Lorenzo Rivera, dirigente del partido, y Javier Sánchez Galicia como parte de su grupo de asesores.

Giovanni Camarillo, por parte del partido, y Sara Martínez, quien ha trabajado en los últimos años cerca del candidato, fueron los responsables de la comunicación social de la campaña priista.