Los candidatos evaden fijar su postura sobre la deuda pública y la legislación de las bodas gay, o realizan propuestas similares a las del presidente López Obrador.

Por: Osvaldo Valencia

Entre promesas y evasivas los candidatos del PAN-PRD-MC y del PRI a la gubernatura, Enrique Cárdenas Sánchez y Alberto Jiménez Merino acudieron al encuentro Conversatorio Estatal: Puebla y su Futuro Democrático, organizado por el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) campus Puebla.

En el evento, al que no asistió el abanderado por la coalición Juntos Haremos Historia, Miguel Barbosa Huerta, –lo que los organizadores se encargaron de recordarlo en cinco ocasiones–, los candidatos a Casa Puebla dialogaron con los universitarios.

El ex rector de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap) evadió fijar su postura sobre la deuda pública del estado y la legislación de la unión legal entre personas del mismo sexo al considerar que son temas de competencia del Congreso local.

En el caso de la integración de las bodas gay en el Código Civil del estado, el académico comentó que está a favor del respeto y la tolerancia entre las personas, además de que en la diversidad se encuentra la riqueza, aunque enfatizó que debe ser el Legislativo el que defina los temas polémicos de la entidad.

“En temas controvertidos y en muchos otros temas tenemos que recurrir a la soberanía de la Legislatura, tenemos que entrarle de lleno a que el Congreso haga su parte, que el Congreso sea realmente nuestro representante y, como nuestros representantes, reflejen el sentir de la población; en ese sentido, como gobernador, sería absolutamente respetuoso invitando a todos los ciudadanos a que se empoderen para estar en el Congreso y defiendan lo que debe ser para la sociedad”, respondió.

En cuanto a lo que hará con la deuda pública estatal, reprochó al Poder Legislativo no hacer su trabajo para revelar el endeudamiento real de la administración gubernamental, que a su decir es mayor a los 30 mil millones de pesos, por lo que prometió autonomía entre los tres poderes para que los diputados hagan su trabajo.

CONTINÚAN LAS PROMESAS

En tanto, el candidato priista hizo promesas en temas de seguridad, defensa de la mujer y paridad en la conformación de su gabinete.

Jiménez Merino prometió que la mitad de su gabinete será conformado por mujeres y la otra mitad por hombres, además de que cada género cumplirá una cuota de la mitad de puestos, es decir 25%, para jóvenes; sin embargo, evitó detallar qué tipo de cargos serían para jóvenes y mujeres.

También adelantó que el secretario de Seguridad Pública será un mando militar que no se encuentre activo, y la Fiscalía Especializada en Atención de Delitos contra las Mujeres será encabezada por una mujer.