Garganta Profunda
Por: Arturo Luna Silva / @ALunaSilva
La guerra sucia contra Luis Miguel Barbosa tiene origen, operación y pago, con recursos públicos, en Jalisco. La evidencia muestra que las denuncias del candidato de Morena a la gubernatura y de su dirigente nacional, Yeidckol Polevnsky, que responsabilizan al gobernador jalisciense Enrique Alfaro, de Movimiento Ciudadano (MC), son fundadas. La trama que desnuda el caso es una joya, una vinculante confesión de parte: el alcalde de Zapopan, Pablo Lemus, se deslindó y anunció, vía Twitter, el rompimiento con la consultoría Indatcom, que manejaba hasta el martes las redes sociales del Ayuntamiento. La empresa cometió el “error” de postear propaganda del candidato en la extraordinaria poblana del PAN, PRD y MC, Enrique Cárdenas, y dejó a esta torpe conspiración sin camuflaje; ya se pide la intervención de la Fepade.
Incluso Cárdenas debió reconocer también que Indatcom trabaja para su campaña, pero, muy a su estilo, eludió ir a fondo y aseguró que desconoce la relación de esa empresa con los gobiernos de Zapopan y el estatal de Jalisco.
“Esta empresa da servicios a mucha gente y también le da a la campaña. Lo que hagan con otros clientes, no sé, es cuestión de preguntarles”, fue su respuesta en entrevista.
El nexo Zapopan-Alfaro-Indatcom contra el abanderado de Juntos Haremos Historia en Puebla (Morena, PT y PVEM) también podría ser investigado y sancionado por el Instituto Nacional Electoral (INE), que conduce el proceso extraordinario estatal, si hay denuncia.
La consejera electoral federal Dania Paola Ravel, integrante de la Comisión de Quejas y Denuncias, adelantó en Puebla que, de ser así, se abriría un proceso.
Luis Miguel Barbosa Huerta, en tanto, anunció que solicitará la intervención de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade).
Presentará una denuncia por uso de recursos públicos para fines electorales contra el Ayuntamiento de Zapopan y asegura que la evidencia es vinculatoria con el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez.
El puntero de todas las encuestas tildó, y con razón, de tontos a los maquinadores de la guerra sucia en su contra.
“Hasta tontos son (porque), se les fue el enter sin cambiar la página. Ahora que Alfaro explique qué está pasando”, dijo en referencia al post que se hizo desde la página de Facebook del gobierno de Zapopan, la noche del lunes, para convocar el acto de campaña “Cárdenas Unplugged”, que se realizará este 8 de mayo en la colonia San Baltazar Linda Vista.
Por ese muy torpe y grave error, una verdadera estupidez, se ha podido corroborar lo que se había denunciado en espacios periodísticos ‒aquí mismo en Garganta Profunda‒ y en declaraciones de los afectados de Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Están además involucradas otras dos empresas: Eu Zen y La Covacha.
Pero la trama no tiene desperdicio y resultó una confesión.
Tras el post en Facebook, que habría costado a Indatcom perder un contrato paralelo de 15 millones de pesos por una concesión que le fue adjudicada directamente por el gobierno de Zapopan, de acuerdo con datos de Morena, vino el deslinde del alcalde.
“Anoche, la agencia que maneja los contenidos de las cuentas de redes sociales del Gobierno de Zapopan desde 2016, Indatcom, cometió un grave error, uno que no podemos pasar por alto”, escribió la mañana del martes en Twitter Pablo Lemus Navarro.
Y siguió el alcalde de Zapopan en su intento de lavarse las manos:
“Sabemos que como empresa manejan y han manejado la comunicación en redes de empresas, gobiernos y candidatos, pero no puedo permitir que su falta de cuidado nos vincule con una campaña con la que no tenemos nada que ver”.
Y agregó, buscando la exoneración, al menos la pública, porque faltará ver que dicen la Fepade y el INE:
“Por ello, he instruido que se dé por terminada nuestra relación con Indatcom a partir de este momento”, sentenció el alcalde de Movimiento Ciudadano, Pablo Lemus Navarro, correligionario del gobernador Enrique Alfaro Ramírez.
Dos cosas son irrefutables: el gobierno municipal está metido en un fuerte brete y la evidencia vincula a la administración estatal de Alfaro.
Indatcom también puede decir adiós a los 15 millones de pesos que cobraba de ese
Ayuntamiento.
De acuerdo con la denuncia en conferencia de prensa del vocero de Morena en Puebla, Carlos Figueroa Ibarra, el contrato paralelo de 15 millones de pesos de Indatcom con ese Ayuntamiento, le fue retirado.
Además, se han ubicadas las empresas Eu Zen y La Covacha como participantes en la operación de la guerra sucia contra Barbosa Huerta, como lo citamos aquí en entregas anteriores.
Se deslindó Lemus, pero en el fondo confirmó las denuncias de periodistas y de Barbosa y Yeidckol.
Apenas el sábado, en gira con el candidato, la ex senadora reiteró que el gobernador jalisciense Alfaro ha pagado 200 millones de pesos en total, para que se golpee a Barbosa.
Hay más datos que están muy a la vista: las empresas que Alfaro financia con el erario para favorecer a Enrique Cárdenas Sánchez y para operar la guerra sucia contra el puntero, sólo privilegian el contenido de Movimiento Ciudadano ‒al que está afiliado el mandatario de Jalisco‒, en la campaña en Puebla.
A los panistas, y eso es sencillo de comprobar con una navegación rápida en redes, no los dejan subir sus contenidos, aunque el ex rector de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap) sea candidato en común.
En esta trama de “injerencia grave” de gobiernos, municipal y estatal, de una entidad en la elección extraordinaria de otra, los presuntos conspiradores están pasmados y ni entre ellos se respaldan.
Apenas se deslindó el alcalde de Zapopan de la compañía que manejaba las redes oficiales de su Ayuntamiento, a Indatcom le salió un defensor y al presidente municipal un detractor, el mismísimo secretario General de Acuerdos de MC y ex diputado federal plurinominal, Jorge Álvarez Máynez.
“Tan ‘grave’ que no hay una sola nota del tema ni reclamos generalizados y la mayoría se enteró hasta que lo informas, Pablo (Lemus Navarro).
“Quienes describes como ‘empresa’ son, en realidad, una comunidad que ha sido fundamental en nuestro crecimiento. Errores cometemos todos. Aquí ya hubo dos”, le respondió al alcalde en Twitter.
Y la sospecha es inevitable. Allá y aquí, hay quienes se preguntan ¿de qué tamaño es el moche?
En conclusión, el “error” confirma la mano de Alfaro detrás de la guerra sucia contra Barbosa en Puebla, y así lo sostiene el candidato, quien procederá ante autoridades electorales.
Hay aroma de ataques foráneos con dinero público.
Se percibe la configuración de varios delitos.
Huele a que se cayó la conjura.