Mesa Cuadrada 
Por: Gabriel Reyes Cardoso / @GabrielReyesCa3

Cada nuevo gobierno puede renovar en los padres, la esperanza de que podría cambiar su
circunstancia familiar. Sin embargo los adentra en mayores incertidumbres.

Quien tiene trabajo en el gobierno, puede perderlo. La nueva Austeridad es su principal enemigo.

Quien trabaja en otras empresas, puede perderlo. Las nuevas políticas fiscal y laboral pueden operar en su contra.

Quien vende en la calle, lo seguirán persiguiendo y podría ser reubicado en un lugar menos
favorable.
Quien tiene un comercio fijo, resentirá los efectos anteriores.

En fin, no siempre los nuevos gobiernos auguran mejores condiciones, aunque todos, los nuevos gobernantes y los electores intentarán hacer de la nueva etapa, opción al menos, no tan difícil como la que actualmente vive.

Por eso, cuando el gobernador Miguel Barbosa habla de reconciliación y paz, entendemos que está pensando en que los poblanos y poblanas encontremos en su gobierno algo diferente que, al menos, comience construyendo nuevas condiciones para que todos podamos disponer de nuevas

y mejores oportunidades para cambiar nuestras circunstancias familiares.
Ya no andamos buscando esperanzas…por ilusorias y redentoras que fueran.

Votamos para que Barbosa fuera nuestro gobernador y con ello para insertar de lleno a toda Puebla en la Cuarta Transformación Nacional y no vamos a rajarnos. Lo hicimos bien pensado.
Sólo que debemos hacerlo con verdad y responsabilidad.

No todo en la Cuarta Transformación es importable a nuestro estado. Ni todo es viable para nuestra situación local. Ni todo está diseñado para nosotros los poblanos.

Así que lo primero que esperamos del gobernador Barbosa es que importe, de la 4 T, la buena experiencia.
A ninguno conviene simplemente copiar, solo por la más humilde solidaridad con el
presidente.

Andrés Manuel necesita que le ayudemos en su gobierno, que es totalmente inédito y para el cual no hay recetas antiguas, porque precisamente, su principal fortaleza y por la cual votamos para hacerlo presidente, estará en no copiar las recetas antiguas.
Está comprobado y aceptados por los electores, que fueron políticas que solo operaron en nuestra contra. La corrupción, la impunidad y el cinismo no necesitamos repetirlas. Huimos inteligentemente de ellas al votar por el Peje.
Andrés Manuel necesita que aportemos la opción poblana para que enriquezca su portafolio
nacional de oportunidades. Flaco favor le haríamos formando a Puebla y los Poblanos una
carga adicional improductiva para la 4 T, aunque estemos convencidos de que su menú de
opciones pudiera ser muy amplio.

Necesitamos en todo caso, un gobierno diferente que construya una gobernabilidad y una
gobernanza diferente, basada en mayores oportunidades para que los ciudadanos comunes y corrientes intervengan en el diseño de las políticas públicas, intervengan en su ejecución y que operen con cargas justas y equitativas en el esfuerzo y en la distribución de beneficios.
Necesitamos un gobierno que nos haga más productivos y a nuestro esfuerzo socialmente
rentable.

Y eso, no lo logrará el gobernador Barbosa, repartiendo dinero y menos quitándoles a quienes ahora, con ayuda o sin ayuda del gobierno, producen empleo, mercancías o servicios.