Economía, Política y Otros Pecadillos
Por: Michel Chaín Carrillo / @MichelChain

ECONOMÍA

¡Pobres de mis amigos defensores acérrimos de la 4T! Cuando creían que con los cambios en la SHCP finalmente se habían librado de los esquiroles que boicoteaban a AMLO y que iban a conectar un “hitazo” con la presentación (aunque fuera con seis meses de retraso) del Plan de Negocios de Pemex… ¡pues nada más no se les hizo!

Y es que lo que hemos podido ver del Plan de Negocios de la empresa, es más una vuelta al pasado que una respuesta de fondo a la problemática que hoy vive.

Por un lado, el Gobierno Federal le inyecta 141 mil millones de pesos de recursos presupuestales frescos durante los próximos tres años a Pemex y reduce su carga fiscal del 65% al 54% (lo que significa cerca de 128 mil millones). De esta manera, palabras más o palabras menos, el Gobierno Federal dejará de gastar en escuelas, medicinas, investigación o becas y, en su lugar, dedica esa lana a apoyar a la petrolera para que realice exploración (aunque hay privados que podrían asociarse para hacer ellos ese gasto) y pueda cumplir sus compromisos financieros de corto plazo.

Por el otro, les cierra la puerta a las alianzas con el sector privado para exploración y producción y se decanta por contratarlos, mediante contratos de servicios, para esas actividades. La desventaja de este esquema, que ya se utilizó en el pasado, es que sin asociaciones con privados la totalidad del costo de cada exploración fallida lo cubre en su totalidad a Pemex. El otro riesgo es que el área de Pemex que decide a qué empresas contratar para la exploración acumula mucho poder discrecional y, como se ha visto en el pasado, es muy probable que termine cayendo en actos de corrupción.

El Gobierno Federal, que nos acaba de decir en boca del titular de la SCT que no va a recuperar dinero con la venta del mentado avión presidencial, tiene que hacer malabares para no contratar deuda para pagar sus programas sociales, hacer sus muy polémicos proyectos estratégicos, apoyar el béisbol, detener y hospedar migrantes, darle dinero a algún Gobierno centroamericano, echar a andar la Guardia Nacional y apoyar a Pemex. ¡Ah! Y también construir una refinería que no termina de convencer y que seguimos sin tener claridad de cuánto va a acabar costando.

Si bien la inyección de recursos por parte del Gobierno en algo puede ayudar a que las calificadoras no degraden aún más la calificación de Pemex, ya que queda claro que van a tener dinero para enfrentar sus compromisos de corto plazo, la realidad es que las ineficiencias de Pemex ahí siguen y, si por algo no logran producir petróleo y venderlo tal como los están proyectando, no se ve que la empresa tenga algún plan de contingencia para brincarla. Y, ahí sí como dijera el clásico, se nos viene la noche.

POLÍTICA

Me encontré con un texto muy interesante de José Woldenberg en Nexos (“Minoría de votos, mayoría de escaños”) que plantea una pregunta muy interesante y que, dado lo contundente de la votación que llevó a López Obrador, muchos analistas han obviado: Si la coalición “Juntos haremos historia” obtuvo únicamente el 44% de los votos para la Cámara de Diputados ¿cómo es posible que haya terminado con la mayoría de asientos?

A decir de Woldenberg, y yo coincido, se trata de una alteración al principio de representación que debe imperar en el resultado de cualquier elección porque, si la minoría de votos se transforma en mayoría de diputados… ¡Pues algo anda mal!

La manera de poder abordar esta falla en el diseño de las reglas electorales lo explica de manera magistral Woldenberg y me parece ocioso tratar de replicarlo aquí (puede consultar el texto original, pues), pero sí me atrevo a levantar la pregunta incómoda. ¿Quién va a ser el valiente que alce la voz en la Cámara para señalar este sinsentido y buscar que no se pueda repetir?

OTROS PECADILLOS

Los amigos de Umbro no decepcionaron con el jersey del Puebla para esta temporada. Con un diseño clásico, que respeta los colores del equipo y nos regala una franja intensa y con un diseño que emula el plumado propio de la poblanísima talavera, el equipo tiene un uniforme elegante, futbolero y con mucha identidad. Lo malo es que, por lo menos en la jornada inaugural, el equipo no estuvo a la altura y los méndigos perros fronterizos (entiéndase, los Xolos de Tijuana), tal como sucedió en la última jornada de la temporada pasada, nos la volvieron a aplicar para dejarnos con tres goles en contra por sólo uno a favor en la cancha del Cuauhtémoc. Ojalá “El Chelís” sepa inyectarles ánimos a los jugadores para reponerse de este nada deseable descalabro inicial y que esta temporada no sea de tanto sufrir.