Las Serpientes

Por: Ricardo Morales / @riva_leo

 

El primer discurso que dirigió el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, estuvo lleno de mensajes encriptados y no tan encriptados.

Algunas veces de manera más que directa y otras en forma de parábolas, el gobernador de Puebla advirtió, por un lado, las que serán sus prioridades, pero también dejó en claro que no habrá “borrón y cuenta nueva” en el combate a la impunidad.

“La reconciliación no se alcanza a través de la impunidad, sino con la aplicación de la ley”, sentenció, tras hacer una advertencia y dejar en claro que desmantelará, a través de la Contraloría (en manos, por cierto, de alguien que se entrenó en las filas del Mossad y es un ex morenovallista) el modelo de negocios, mediante el cual algunos desde el poder se enriquecieron. (Primera parábola).

Cabe resaltar que mientras el gobernador de Puebla hablaba, el encargado de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto, observaba desde su lugar en el Auditorio Metropolitano, mientras asentaba con la cabeza.

También advirtió que no le temblará la mano para enfrentar a la delincuencia, la cual asola a la entidad; en primera instancia dijo que se comprarán mil nuevas patrullas y se contratarán a más elementos de seguridad para combatir a la delincuencia.

“El problema de la inseguridad no es de percepción y quien lo crea así, pues entonces debería de renunciar”, asentó el mandatario estatal mientras en su asiento, la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, se movía medio incómoda desde su butaca.

Las carretadas de aplausos no se hicieron esperar, mientras al interior del inmueble el grito “¡Barbosa gobernador, Barbosa gobernador!” no se hizo esperar, la bufalada había encontrado, como lo hace cada seis años, a su nuevo pastor.

De llamar la atención fue que dentro del discurso de toma de posesión del gobernador poblano, la única titular de una dependencia estatal mencionada fue la de Desarrollo Económico, la brillante Olivia Salomón, quien señaló Barbosa que buscará inversiones para Puebla en Estados Unidos, Canadá, Europa y Asia; incluso, adelantó que ya hay algunas empresas amarradas para Puebla.

El mandatario estatal se dejó querer ante sus invitados especiales, en su mayoría integrantes de la 4T, salvo los gobernadores priistas de Tlaxcala, Marco Mena; y Omar Fayad, de Hidalgo, el esposo de Vicky Ruffo, quien lució un look con mostachón a la Clark Gable.

La toma de posesión del gobernador de Puebla no pudo estar ajena al aplausómetro. Uno tras otro, la nueva clase política desfiló por el Auditorio Metropolitano sometida a la opinión pública y al cuchicheo.

De esta forma, futurizando y tal cual como lo señalamos en este mismo espacio, el canciller Marcelo Ebrard fue uno de los más aplaudidos y si no, el que más.

El hombre que maneja las relaciones internacionales del país fue apapachado por las nuevas huestes barbosistas, quienes cobijaron al ex jefe de gobierno del entonces Distrito Federal y quien fuera aliado del hoy “defenestrado” morenovallismo.

También hubo aplausos a raudal para quien ya desde ahora se sabe será una de las consentidas de la nueva administración, la aún presidenta nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky.

La polémica mujer, como lo mencionamos, fue clave para la designación de Barbosa como candidato y para que volviera a repetir en la misma posición en este año para alzarse con el triunfo electoral en 2019.

El tercer lugar fue para el coordinador de los diputados de Morena en la Cámara baja y líder del Congreso, Mario Delgado, personaje el cual ya señalamos, tiene una muy buena relación con el mandatario estatal, merced a que caminaron juntos en la vida parlamentaria.

Con el “colmillo largo y retorcido” que lo caracteriza, Miguel Barbosa tuvo también sus deferencias para el líder del Senado de la república, Ricardo Monreal, el zacatecano, quien en todo momento estuvo arropado por su par, el oriundo de Acatzingo, Alejandro Armenta Mier, quien fue el principal contrincante de Barbosa en la pelea por la candidatura de Morena a la gubernatura.

El gobernador de Puebla también destacó la presencia de dos polémicos personajes de la 4T, el diputado federal Gerardo Fernández Noroña, quien, protagonista como es, trató de ganarse en todo momento los reflectores; así como de Cuitláhuac García Jiménez, gobernador de Veracruz, quien también se dejó cobijar por la nueva bufalada barbosista.

En contraste, muy discretos, aunque en primera fila también, se dejaron ver dos personajes, que ejemplifican muy bien la doble moral que envuelve a la 4T, El señor de la ligas, René Bejarano, y su esposa, la diputada federal, Dolores Padierna.

De esta manera trascurrió el mensaje de toma de posesión del gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa, y arrancó la nueva era, la de la 4T en la entidad.