Por: Mario Galeana

Con el voto en contra del PAN, el Congreso de Puebla aprobó la iniciativa que el gobernador Miguel Barbosa Huerta envió para ampliar las causales de indulto, y ordenar así la preliberación de presos por motivos políticos y de mujeres apresadas por interrumpir su embarazo, entre otros sentenciados.

La propuesta se avaló con 32 votos a favor, una abstención y cuatro votos en contra de la bancada del PAN. La coordinadora legislativa de este partido, Mónica Rodríguez Della Vecchia, no sólo criticó la propuesta por supuestamente interceder en las labores del Poder Judicial, sino que incluso sugirió que la liberación de reos propiciará más linchamientos.

“Un reo más en las calles es motivo para que los ciudadanos sigan procurando la justicia por propia mano y los linchamientos, y estos linchamientos se puedan mantener como pan de todos los días. Eso no es lo que esperan los poblanos de nosotros”, soltó.

La defensa a la propuesta corrió a cargo de los morenistas Gabriel Biestro Medinilla, Tonantzin Fernández Díaz y Vianey García Romero, además de la petista María del Carmen Cabrera Camacho.

García Romero, quien preside la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, rememoró el caso Chalchihuapan, y dijo que la reforma de indulto trata de revertir las posibles violaciones a derechos humanos cometidas durante los gobiernos panistas.

Mientras que Cabrera Camacho, titular de la Comisión de Procuración y Gobernación de Justicia, reprobó la postura de Acción Nacional y culpó a su partido de distintas anomalías en los procesos contra personas apresadas.

“Estas personas están en la cárcel, olvidadas, sin derecho a un debido proceso. No, no hemos olvidado el pasado. Al contrario, sigue estando muy presente. Por eso estamos aquí, con una nueva etapa, con una nueva Legislatura”, dijo.