Garganta Profunda
Por: Arturo Luna / @ALunaSilva

Como evidencia de la importancia y los “buenos ojos” con que el presidente de la República ve a Puebla, los próximos 4 y 5 de octubre, Andrés Manuel López Obrador convertirá al estado en el epicentro del país al encabezar una reunión de seguridad del más alto nivel, el primero de esos días, y realizar su conferencia mañanera en la capital, para luego salir de gira con el gobernador a la Mixteca. Al día siguiente irá a la zona norte. En su cuarta visita a la entidad, la tercera con la actual administración, el tabasqueño está dejando claro que Miguel Barbosa es de sus consentidos y eso, sin duda, es una buena noticia para todos los poblanos, incluso debería serlo para los detractores del morenista.

Barbosa ha ido ganando terreno en el ánimo de AMLO y en el espacio como operador del Primer Mandatario.

Es un gobernador sólido.

Se ha convertido en poco más de un mes como mandatario en referente y líder regional.

Así lo muestran sus reuniones y convenios en materia de seguridad con los gobernadores de Veracruz y Tlaxcala.

Pronto habrá noticias con los de Morelos e Hidalgo.

En el vacío de hombres (y mujeres) confiables que ha enfrentado López Obrador a su alrededor, en sus primeros nueve meses de gobierno, el poblano ha sabido irse ganando su cercanía.

Y eso significa buenos augurios para la entidad.

Hace una semana, Miguel Barbosa perfilaba que se podrían reflejar en una “buena cantidad de dinero” para Puebla en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), para el Ejercicio Fiscal 2020.

Apenas el miércoles estuvo en Palacio Nacional.

La foto juntos tuvo como fondo el Mural de la Batalla del 5 de Mayo, que está en el histórico inmueble.

Hay muchos temas en la agenda.

Seguridad, por supuesto.

PEF y recursos extra y etiquetados, para aplicarse en el que será el primer año completo de la administración barbosista.

La construcción de cuatro hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social, en sustitución de San Alejandro, que convertirán a la entidad en la que más camas tenga del IMSS.

En ese contexto, la visita de López Obrador llega con buenas señales.

Convertirá en esos días, dentro unas tres semanas, a Puebla en el epicentro del país, en muchos sentidos.

En la capital poblana ofrecerá el tabasqueño la que apenas será su segunda conferencia mañanera fuera de Ciudad de México y de Palacio Nacional, desde que comenzó su gobierno.

(La primera fue en Monterrey, Nuevo León, el 20 de febrero pasado).

Más tarde, ese mismo 4 de octubre, AMLO irá de gira con Barbosa a la Mixteca poblana.

Visitarán Chiautla y Tepexi de Rodríguez.

Al día siguiente, según anunció el gobernador, Ixtepec y Zacapoaxtla.

Puebla está, sin duda, en el mejor de los ánimos presidenciales.

Tiene la atención de AMLO.

Sin importar desde dónde se vea, son buenas noticias.