Las Serpientes
Por: Ricardo Morales / @riva_leo

El presupuesto que prepara la administración estatal, que encabeza el gobernador Miguel Barbosa Huerta, tiene claros fines electorales si se toma en cuenta que en 2021 habrá comicios en Puebla y en el país.

Basta con echarle un vistazo a la propuesta de Presupuesto de Egresos del Estado para 2020 que entró a discusión en la legislatura local y el cual contempla una ampliación de recursos 16 veces mayor para la Secretaría de Bienestar, de los que ejerció en este año.

La dependencia, a cargo de la diputada federal con licencia por el Partido del Trabajo, Lizeth Sánchez, de acuerdo con esta propuesta, contará con una bolsa de 10 mil 488 millones de pesos, cifra impresionante, misma que sin duda es la más importante en la historia de esta dependencia. En este año tan solo se manejaron 601 millones de pesos en la Secretaría de Bienestar.

Por supuesto que nada es verdad, nada es mentira y todo es de acuerdo con el color del cristal con que se mira. Seguramente habrá quien vea en este presupuesto un compromiso real por parte de la administración estatal para combatir la pobreza.

Esto sólo lo sabremos cuando se haga pública la forma como se van a aplicar estos recursos, las reglas de operación de los programas y los alcances que tendrán los mismos para disminuir los principales indicadores de pobreza que laceran a la entidad.

Sin duda es positivo que se destine una bolsa de este tamaño a favor de la dependencia que se encarga de combatir la desigualdad en la entidad y nadie puede estar en contra de ellos, pero se deberá vigilar muy de cerca que nadie lucre con estos programas, como ya lo buscaba hacer el ex coordinador de los delegados de la Secretaría de Gobernación, Jesús El Negro Vázquez.

Si la estrategia que aplique el próximo año la Secretaría de Bienestar va enfocada efectivamente al combate a la pobreza, mediante verdaderas políticas públicas y no acciones clientelares, entonces esto seguramente incidirá de manera directa en el tema que es prioritario para los poblanos, que no es otro que el de la inseguridad.

Liz Sánchez y su equipo tienen en sus manos una gran responsabilidad, será Bienestar la súper secretaría de la administración estatal y este hecho hay que remarcarlo.

La funcionaria estatal ha demostrado tener capacidad y en este mismo espacio lo hemos consignado, es junto con Olivia Salomón, la titular de la Secretaría de Economía, las únicas que han dado resultados durante los 100 primeros días de administración y eso hay que decirlo.

Sólo para tener una referencia del tamaño de la bolsa que tendrá en sus manos la secretaria de Bienestar, Liz Sánchez, manejará 11% del total del presupuesto asignado al estado de Puebla.

Se transformará en un Santa Claus, rechoncho y con mucho billete que podrá recorrer todo el estado haciendo lo que todo político sueña, repartiendo recursos y eso a su vez, también se traduce en rentabilidad, lo cual se deberá ver y analizar en su momento.

Pero como todo en la vida, a cada acción corresponde una reacción y en este caso la cobija ya no alcanza para cubrir a todos, los damnificados serán Salud y Educación de acuerdo con el proyecto enviado al Congreso local.

Para la Secretaría de Educación se contempla un ínfimo aumento de 4.3%, ya que tendría 32 mil 186 millones 108 mil 448 pesos, en comparación con los 31 mil 123 millones 163 mil 186 pesos de este 2019.

En tanto, a Servicios de Salud del estado se le castigaría a su vez con un recorte de 4.9%, pues pasaría de cinco mil 475 millones 548 mil 279 pesos, a cinco mil 204 millones 941 mil 925 pesos, lo cual significa un duro golpe, presupuestalmente hablando.

Seguridad Pública, que es la demanda prioritaria para los poblanos, recibe un fuerte incremento al pasar de dos mil 602 millones de pesos en este año, a cuatro mil 253 millones para el próximo, lo cual suena bien, aunque pareciera insuficiente para hacer frente a la ola delictiva que azota a la entidad.