Concientización. El objetivo de limitar la velocidad máxima en el Centro Histórico a 30 kilómetros es a fin de evitar accidentes y muertes por hechos de tránsito

Por: Mario Galeana

Foto: Alejandra Ortega

La presidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, anunció que los macetones colocados en la calle 2 Oriente para proteger el paso de los peatones serán sustituidos por otras estructuras, además de que se instalarán señaléticas que indiquen reducción de velocidad.

En entrevista, la alcaldesa capitalina minimizó las críticas a la instalación de bolardos al explicar que, al acotar el paso de vehículos y limitar la velocidad máxima en el Centro Histórico a 30 kilómetros por hora, se creará una nueva cultura de vialidad para preservar la vida de los peatones.

“En esas expresiones (las críticas) poco importan las personas en silla de ruedas, las personas con discapacidad, o los peatones. Es un proceso que debemos ir cambiando. Vamos a continuar con el modelo de visibilizar y garantizar los derechos de todas y todos los peatones”, subrayó al mediodía de ayer, tras entregar equipamiento y constancias a policías municipales en activo.

SEGUNDA ETAPA

A su vez, la titular de la Secretaría de Movilidad de la capital, Alejandra Rubio Acle, anunció que se pondrá en marcha una segunda etapa en el proyecto de instalación de bolardos y macetas para proteger a los peatones en otros 15 puntos de la ciudad.

La funcionaria municipal negó que los bolardos obstaculicen el tránsito —como han sugerido organismos empresariales y automovilistas— y defendió su instalación al explicar que éstos llevan como propósito reducir las muertes por accidentes viales.

Sólo en 2019, ejemplificó, la Secretaría de Movilidad contabilizó 54 muertes por atropellamientos en cruces de vialidades.

“Es un ejercicio de ciudadanía y empoderamiento para tomar nuestras calles, para que las vivamos, hagamos ciudad y nos sintamos identificados; luchemos todos porque el objetivo es que Puebla sea una ciudad humana y segura”, señaló.

En tanto, el presidente de la Comisión de Movilidad, Eduardo Covián Carrizales, advirtió que los ciudadanos que retiren o dañen los bolardos o macetas colocados por el gobierno municipal serán sancionados con multas.

“La sanción no es específica, la sanción será acorde con quien dañe mobiliario urbano”, explicó.

En días pasados, integrantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) señalaron que la instalación de este tipo de mobiliario urbano carecía de planeación, pues sólo había entorpecido la circulación en el Centro Histórico.

Según los empresarios, los bolardos han limitado el paso de autobuses turísticos que otorgan recorridos guiados a visitantes.