Foto: Especial

Nuevos bríos. Para el consejero estatal, la llegada de Alfonso Ramírez Cuéllar a la presidencia nacional representa una derrota para quienes “no aprueban el matrimonio igualitario ni los derechos de la mujer”

El nombramiento de Alfonso Ramírez Cuéllar como dirigente nacional de Morena en sustitución de Yeidckol Polevnksy Gurwitz, quien quedará al frente de la Secretaría General del partido, pondrá fin a las “imposiciones de personajes indeseables” que, tras ser candidatos, terminaron por ocupar distintos cargos públicos, sentenció Pablo Salazar Vicentello, aspirante a la dirigencia estatal morenista.

En entrevista, consideró que el arribo del nuevo líder significa una derrota para aquellos que “no aprueban el matrimonio igualitario, los derechos de la mujer y, en cambio, aprueban alzar a la tarifa al transporte público”, en clara alusión al grupo político de Gabriel Biestro Medinilla, coordinador de la bancada morenista en el Congreso local.

“Pierden quienes apostaban a seguir con Yeidckol, pierden quienes esperaban que los impusieran como candidatos en 2021 o quienes creían que serían nombrados delegados aquí en Puebla”, lanzó.

Salazar Vicentello urgió a la nueva dirigencia nacional de Morena a remover al delegado en Puebla, Mario Bracamonte González, a quien responsabilizó por la falta de cohesión entre las distintas corrientes locales y por el nulo trabajo político y de organización que el partido ha realizado en el estado desde su nombramiento.

“Necesitamos que se haga el cambio de delegado en el estado de Puebla para poder convocar a asambleas y se garantice piso parejo. En las que él organizó el año pasado tuvimos muchos problemas, ni siquiera había lo necesario para que se llevaran a cabo”, insistió.

Explicó que, tras la sesión del Congreso Nacional en la que se definió el nombramiento de Ramírez Cuéllar, Morena tendrá menos de tres meses para formalizar el inicio del proceso de elección del nuevo Comité Ejecutivo Nacional (CEN).

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ordenó que la renovación se realice tomando en consideración a todas las personas que se afiliaron al partido hasta 2019, siempre y cuando se les entregue una credencial para acceder a las asambleas.

“El padrón en realidad no tiene ningún problema. Nosotros creíamos que se debía tomar en cuenta a quienes estaban militando hasta 2017, y el Tribunal creyó que eso limitaba la participación o los derechos políticos de otros militantes”, ahondó.

Tras este proceso, el partido comenzará la renovación de sus dirigencias de todo el país, incluida la de Puebla. El último intento de renovación interna, registrado el 20 de octubre, culminó en connatos de violencia y en la suspensión de cuatro de 15 asambleas.

En su opinión, el arribo de Ramírez Cuéllar no inclina la balanza a favor de ninguna corriente a nivel local, puesto que su designación fue producto de un acuerdo de unidad ente líderes como Bertha Luján Uranga, presidenta del Consejo Nacional; y de Mario Delgado Carrillo, coordinador de diputados federales de Morena.

“Alfonso representa esa unión de todas las fuerzas. La llegada de él significa eso, salvo de aquellos que respaldaban a Yeidckol”, concluyó


Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *